La noche transcurre con normalidad dentro de la base, y al día siguiente, Spreen y Missa son despertados por los gritos provenientes de la habitación de Quackity. Ambos se levantan asustados y al llegar a la habitación se encuentran con Rubius y Alex discutiendo mientras Shadoune les observa sentado sobre un cofre con una taza de té en sus manos, ignorando por completo la pelea que se desata frente a él.
Spreen suspira y se encamina hacia ambos chicos para detener la pelea parándose en medio de ambos, sus ojos observan fijamente a Quackity, quien sostiene entre sus manos el collar que siempre suele usar y al que cuida más que a su propia vida, parece tener la cadenita rota aunque no puede ver más allá debido al fuerte agarre que ejerce el peliengro sobre dicho objeto. Con cuidado, Spreen le quita el collar para ver si puede repararlo y al abrir el pequeño dije de corazón se encuentra con una foto de un Quackity muy sonriente junto a un muchacho desconocido, ambos lucen extremadamente felices y eso le hace sonreír un poco.
—creo que con unas pinzas puedo arreglarlo.—le susurra al mexicano dándole el collar.— no voy a meterme en su pelea porque no es asunto mío, pero odio verte triste.
Alex aprieta los labios antes de abrazarlo con fuerza, antes de que los demás llegaran, él y Rubius habían estado discutiendo por cosas de su pasado que él le había confiado a su amigo oso. Y todo había sido delante de Shadoune que no tenía porqué haberse enterado de las cosas de esa manera, pero no quiere hablar con ninguno de ellos ahora, simplemente quiere despejar su mente antes de terminar haciendo una estupidez como lo que pasó en la mina con su ¿pareja? Aún no han hablado sobre qué son exactamente, pero al chico le hace mucha ilusión la idea de poder llamar al francés su pareja.
Spreen rodea sus hombros con uno de sus brazos y lo guía a la sala de cofres con la excusa de que necesita que lo ayude en un par de cosas, él sabe que sólo es un pretexto para que ambos salgan de ese tenso ambiente y en gran parte lo agradece, es como si él pudiera leer sus pensamientos. Una vez en la sala de cofres ambos se mantienen en silencio mientras el oso craftea algo de ropa nueva con un poco de lana y tintes que consiguió en su última expedición para buscar materiales.
Una vez terminada su tarea se acerca al mexicano con un abrigo de lana color negro y se lo entrega, había escuchado que por las noches comenzaría a hacer aún más frío que de costumbre y lo que menos quería era que sus compañeros de equipo se enfermaran, mucho menos si se trataba de su patito. Alex recibe el abrigo con una sonrisita y se lo prueba, dejando su collar sobre uno de los cofres detrás de él. Spreen busca entre sus herramientas algunas pinzas para poder arreglar aquel preciado objeto para su amigo y al encontrarlas toma asiento sobre un cofre comenzando a arreglarlo.
—no recuerdo mucho sobre ella.—dice Alex mirando por la ventana. Spreen le mira confundido.— me refiero a la persona de la foto... sé que fuimos muy cercanos mientras estábamos en pogtopia e incluso puedo decir que llegamos a ser más cercanos de lo que somos Rubius y yo, pero realmente no lo recuerdo.
Spreen asiente sin decir nada, para ser sincero no tiene absolutamente nada que decir al respecto, aunque recuerda a la perfección todo lo que Alex le contó durante la charla que tuvieron hace semanas. La misma charla donde se dio cuenta de que quería proteger con su vida y amar con su alma a aquel chico de beanie. Sólo se tomó demasiado tiempo para buscar una oportunidad y cuando estaba tomando la valentía para hablarle a Quackity sobre lo que sentía, Shadoune se le había adelantado y prácticamente le robó la oportunidad de estar con un chico tan maravilloso como lo es Alex Quackity.
El más bajo saca de su bolsillo una cajita de terciopelo negro con dos anillos de oro en su interior, Spreen le mira confundido cuando el mexicano toma su mano y coloca uno de los anillos con delicadeza en su dedo anular para, posteriormente, hacer lo mismo con el otro anillo en su propia mano.
—estos anillos me traen recuerdos horribles.—admite el pelinegro volteando en dirección a su amigo.— pero son tan especiales para mí que quería darles una nueva oportunidad de traer un bonito significado, y como sé que siempre voy a poder contar contigo, quise darte uno.
—che pero si te vas a casar conmigo así de la nada podrías haberme invitado un café primero.—bromea el oso antes de darle el collar ya reparado.— no sé cómo lo rompiste, pero tené un poco más de cuidado para la próxima.
Alex asiente con una bonita sonrisa que hace sonrojar un poco al oso. Spreen se levanta del cofre y antes de marcharse deja un rápido beso en la mejilla del mexicano, muy cerca de sus labios. Shadoune, que había estado presenciando toda la escena oculto detrás de una de las puertas que da al salón principal se adentra en la sala de cofres algo molesto. No quiere sentirse celoso porque sabe que Quackity no tiene la culpa de que Spreen no conozca límites, pero por otro lado se siente un poco traicionado cada vez que sus ojos se desvían hacia la argolla de matrimonio que reposa en la mano derecha del chico, como si aquello hubiera sido una señal para Spreen de que le permite hacerle cualquier cosa.
Y una señal para Shadoune de que tal vez no lo ama tanto como se lo ha dicho.
El francés sacude un poco su cabeza para alejar aquellos pensamientos invasivos y se sienta junto a su pareja abrazándolo por los hombros, dejando un beso suave en los labios del más joven que es correspondido con mucho gusto por parte de su chico. Ambos se mantienen abrazados y en silencio hasta que aquel sonido tan característico que da inicio al pvp los alerta. Shadoune se levanta de su lugar y se apresura a buscar algunas cosas necesarias para salir, todo bajo la atenta mirada de un muy preocupado Quackity.
—volveré en un rato, necesito ir a hacer un par de cosas.—susurra Shadoune a su pareja antes de besar sus labios e irse casi corriendo.
Minutos después, Alex puede escuchar como Spreen y Rubius también salen de la base, dejándolo solo con Missa. Quackity observa por la ventana a sus compañeros irse en dirección al bosque, últimamente el pvp se inicia de forma espontánea y en cualquier momento del día, a diferencia de los primeros días donde sólo se iniciaba por las noches.
Ahora sólo le queda esperar a que los tres vuelvan sanos y salvos, y tal vez poder hablar con Rubius y arreglar un par de cosas que tienen pendientes.
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Doux désespoir | shadouckity
FanfictionEn un mundo donde las probabilidades de morir son altísimas, en lo último que alguien pensaría es en enamorarse de alguien. Pero aún sabiendo todos los peligros que los acechan, Shadoune no puede evitar caer en los encantos de cierto patito que le...