De repente entre la gente veo a una figura acercarse, va como alma que lleva el diablo, corrección, él es el diablo, Peter...
Eric rápidamente se pone delante de mi protegiéndome.
-¡¡TÚ!!- señala a Eric- No te acerques a ella. ¿Qué hacés con él?- me pregunta.
-Ella no es tu prometida dejo de serlo hace un tiempo, aunque dudo que por parte de ella alguna vez lo fuera.
- ¿ Pero qué dices?
-Qué se ha casado conmigo.
-Eso no es verdad.- grita Peter.
- Sí que lo es, mira- le enseñó un anillo, mi madre como buena previsora mando a no se quién que hiciera unas alianzas sencillas para que la mentira fuera más creible.
- No puedes haberte casado con él, te tenias que casar conmigo, ese era el trato.
- Yo no firme ningún documento en el que pusiera que seria tu esposa, tampoco te declaras te a mí, así que no me puedes reclamar nada, me conoces des de hace dos semanas.
- ¿ Y él? Lo conoces des de hace cinco días.
- ¡No! Lo conozco des de que vine aquí, es decir hace 12 años.Aparece mi padre con John. La reacción de los dos al verme a mí cogida de la mano de Eric les sorprende, pero ver a mí lado a mí madre con el vestido que lleva tan impresionante cogida del brazo de Andrew ya es inigualable, no sé como no se han caído de culo al suelo.
-¿Isa...Isabel?- pregunta mi padre acercándose.
- Sí- contesta mi madre orgullosa, da un paso adelante con la cabeza bien alta.
-¿ Que haces aquí? - pregunta mi padre con temor, creo que es la primera vez que lo veo con miedo en sus ojos.
- Pues he venido a la fiesta en honor de mi hijo.
- Es imposible que llegarás des de España habiendo empezado a prepararla hace tres días.
-¿ Y quién te ha dicho que yo estuviera en España? Creo que ya sabes que hace tiempo que deje de estar en ese lado del océano, más bien hace como seis o siete años que sabes que no estoy allí.
John que aún está parado frente a nosotros se adelanta y va hacia ellos.
-¿ Como que hace siete años que no estas con el abuelo?
-Anda, James explícale a tu hijo, des de el principio por favor. Te recuerdo que el principio es hace 13 años por si no lo recuerdas, que parece que la edad te está afectando más de lo previsto.
Mi padre se puso rojo de la furia.
- No es un tema para tratar aquí- dijo con un tono tranquilo y amenazador- los asuntos de familia se tienen que tratar en privado.
- Pues vamos a tu gabinete. Andrew, gracias, has mejorado muchísimo des de la última vez- Andrew sonríe divertido porque sabe que mi madre está haciendo enfadar a mí padre a propósito.
- Preciosa, tenemos que repetir, la próxima vez en un sitio menos... Concurrido- y le guiña el ojo, Eric y yo nos reímos por lo bajo, mi madre mira pícaramente hacia donde mi padre está, creo que si no ha estallado lo va hacer pronto.
Mi madre para fastidiar más se acerca a Andrew y le da un beso en la comisura de los labios, y él se lo devuelve tan tranquilo.
-¡ISABEL!- dice mi padre.
- No he hecho nada.
- Vosotros- nos señala a Peter, Eric y a mi- al gabinete, John tu quedate aq....
- No. Yo tengo bastantes preguntas.
- Vamos.
Salimos del salón, de verdad que somos el mejor espectáculo que hay, no necesitamos que vengan actores ni payasos.
Nos dirigimos al gabinete de mi padre, al entrar mi padre no se sienta como hace siempre, debemos haberle descuadrado mucho los planes, porque no deja de ir de un lado a otro.
- John, cariño, no me has dado ni un beso.- le dice mi madre a John.
John corre a abrazarla, es mucho más grande que ella así que prácticamente mi madre es estrangulada por mi hermano a causa de la fuerza del abrazo.
- Mamá...
- Cariño estas enorme, madre mía eres más grande que tu padre- lo mira detenidamente- Katherine tenias razón, tiene mis labios, eres más guapo que tu padre, y mira que él ya lo es - mi padre la mira sorprendido de que haya dicho eso, aunque lo entiendo, viendo todo lo sucedido....
- Deja de achuchar a John, vamos a lo importante, jovencita, ¿ como que estás casada con ese?- señala a Eric como si no fuera nada importante.
- Papá, es mi marido y punto, ¿ Enserio creías que me iba a casar con este energúmeno? - digo refiriéndome a Peter.
-¿ Pero tú quién te has creído furcia...?- solo decir eso ya tiene ha Eric dándole una bofetada.
- A mí mujer no la llamas eso en tu vida, animal- y le vuelve a dar, pero esta vez un puñetazo en la mandíbula.
-Eric dejalo no merece la pena -lo abrazo, y delante de todos lo beso, no lo hago por actuar, lo hago porque no sé, he sentido que él lo necesitaba, para que supiera que le doy las gracias por defenderme.
-Katherine - me llama mi madre- acabemos cuanto antes que tenemos que partir antes del amanecer.
John reconoce a Eric, ha tardado en darse cuenta, pero creo que por la voz y por la vestimenta lo ha reconocido. Lo mira y luego me mira, levanta las cejas, nos está mirando fijamente, Eric me coge por la cintura y me pasa delante suyo, me abraza por la cintura, y apoya su barbilla en mi hombro. Me siento bien estando así con él, aunque hay tensión en la habitación. John cambia la cara rápidamente, y abre la boca en una gran O, nos ha pillado, como, fácil, sabe que yo no me hubiese casado, ya que llevo años diciendo que no me casaré. Cierra la boca y no dice ni mu.
-¿Cuando os casasteis? El plazo del rescate era hasta ayer.- dice mi padre, que ya no puede con sus nervios y con el enfado.
- Ayer- contesta Eric.
-¡¡¡¡Te has casado con un pirata!!!!
- ¡Te recuerdo que tú también!- Ups.
-¿ Como? - dicen John y Peter.
- Cariño, a ver como te explico esto...
- Mamá ¿ de qué habla Katherine?
- Pues veras... Yo... Yo soy pirata.
- No.
- Sí, lo soy, además lo soy de sangre. Vuestro abuelo era pirata, yo soy pirata y ahora Katherine también, y si, está casada con un pirata.
- Me niego- dice Peter- ella debería estar entre mis brazos, no entre los de una rata de mar.
Noto como Eric se tensa, ha levantado su barbilla de mi hombro y ha soltado mi cintura.
- Retira lo que has dicho- dice demasiado tranquilo, su tono es amenazador, me da miedo- retira lo que has dicho.
- He dicho la verdad.
Tal como dice eso Eric se lanza contra él, lo coge del cuello de la camisa y lo estampa contra la pared.
-Retíralo- dice entre dientes.
- No hasta que Katherine se case conmigo.
- Por encima de mi cadáver, ella no quiere estar contigo en un palacio, metida sin salir y maltratada, porque estar contigo es un maltrato.
- Eric suéltalo, no merece la pena, estoy casada contigo, no nos puede separar, ni él ni nadie.- uf que raro se me hizo decir eso, no sé si por el hecho de que ha salido de mi boca o porque de verdad me gustaría que fuera así. - Eric por favor, eres mejor que él. Nos vamos. - digo- John, te quiero, adiós. Y tú- señalo a mí padre- para mi estás muerto.
Eric suelta a Peter y me coge de la cintura, me da un beso en la sien y salimos de la habitación para esperar a mí madre. También sale Peter sostenido por mi hermano, Eric debe haberle hecho daño, pero me da igual se merece eso y mucho más.
Oigo a mis padres discutir, no sé bien bien lo que se dicen pero oigo algo muy claro.
ÉL QUÉ NOS SEPARO FUISTE TÚ, TU ERES EL CULPABLE, NO ACEPTASTE CON QUIEN TE HABÍAS CASADO. YO TE AMABA.
-¿ Amaba? ¿ En pasado?
- ¿ Pretendes que aún lo haga? No sabes lo que has causado, sigo siendo Señora de la piratería, tengo mucho poder, más del que crees, y te puedo asegurar que vas a apagar por todos estos años. James, cometiste un grave error- mi madre lo ha dicho al principio sorprendida y llorando, pero de golpe ha dejado de llorar y su voz a sonado amenazadora, potente, autoritaria. Nunca había visto esta faceta de mi madre.
-Mi amor...
- No soy nada tuyo, deje de serlo hace 12 años. James, voy a ser tu peor pesadilla, vas a ver como paso por encima de ti, veras caer todo lo que una vez construiste.
- Estás muy cabreada, esperemos a mañana y hablemos.
- No. Adiós James, recuerda que yo te amaba, aún lo hago.
Y sale del gabinete con la cabeza bien alta, los ojos sin rastro de lágrimas y con una mirada fría como el hielo, es ahora cuando veo que mi madre cumplirá la promesa que le ha hecho a mí padre, será su peor pesadilla.
ESTÁS LEYENDO
Mi corazón robado por un pirata
FanfictionKatherine Everdeen es la hija del Gobernador de L'Habana. Educada para ser una dama, pero ella no es así. Ella aprendió a utilizar las armas, a pelear... Por sus venas corre sangre de una luchadora. Siempre condenada a tener que obedecer a su padre...