Mi corazón robado por un pirata

Capítulo 18

Vamos a su camarote. Nos sentamos las dos en la orilla de la cama, ella coge mis manos.
-Dime que quieres saber y te contestaré.
- Buenoo....... ¿Des de cuando eres pirata?
- Pues des de siempre, tu abuelo era un gran pirata. Él era pirata hasta que conoció a la abuela, la abuela le dio calabazas por ser pirata así que se propuso dejar toda aquella vida, dejo la piratería,  se convirtió en un hombre de negocios, ya que aunque era pirata tenia pequeños negocios aquí y allí,  entonces lo volvió a intentar con la abuela, ella al ver que había cambiado le dijo que si, que podían intentarlo, al cabo de unos años se casaron, cuando me tuvieron a mí mi padre ya era uno de los hombres más ricos de aquel momento, era comerciante,  dos años después nació tu tío Michael, pero fue un parto muy difícil y la abuela quedo muy débil y no se llegó a recuperar. Cuando yo tenía 8 años ella murió,  fue un golpe muy duro para el abuelo así que volvió a la piratería,  ocupándose igualmente de los negocios y de nosotros, nos llevaba con él.  Teníamos una profesora que era la mujer de uno de la tripulación y era la que nos enseñaba, cuidaba y todo eso. En la sangre llevábamos lo de ser piratas, no nos costó adaptarnos. Yo era como tú de carácter...
- Cualquiera lo diría...
- Calla o no te sigo contando. Yo era fría,  no lloraba delante de nadie, no me gustaba que me vivieran débil. Cuando crecí mi padre me hizo quedarme en tierra, me dijo que yo tenía que cuidar las propiedades, ser buena hija, casarme... Y bueno a mí me apetecía estar una temporada en el mismo lugar.
-¿ Cuando conociste a papa?
- Lo conocí en una de las fiestas a las que tenia que ir siempre, que por cierto siempre tenía que llevar pareja y siempre era tu tío,  al final de tanto aburrirse en las fiestas empezó a observar los vestidos y las telas, accesorios y ahora es uno de los más famosos diseñadores de Europa, por cierto el vestido negro era de él,  cuando le diga que lo has roto te querrá matar.
-Mamá que te vas por las ramas....
- ¡¡Ay si!! Bueno y es eso, que en una de esas fiestas conocí a tu padre, iba muy apuesto,  con su uniforme de la armada británica,  estuvimos hablando bastante ya que yo sabía de armas, barcos, propiedades y todo eso. El abuelo se dio cuenta de que él era un buen partido y que se veía interesado por mi así que con el padre de tu padre acordaron algunas citas para que nos conociéramos,  al final nos enamoramos y acabamos casándonos,  aunque al principio fue por imposición, a mí tampoco me gustaba todo eso de casarme y tener hijos, pero teneros ha sido lo mejor de mi vida. - me dice acariciandome la mejilla,  yo le doy una de mis mejores y más sinceras sonrisas.
- ¿Siempre echaste de menos la piratería?
-Sí, pero prefería cuidar de vosotros, además,  yo era la mujer de un militar de la armada británica,  no podía ser una pirata.
-¿Papá sabia que tu habías sido pirata?
- No, no lo supo hasta un año antes de iros.
-Hubiese preferido haberme quedado contigo...
- No. Lo mejor para ti era irte, mira que mujer más guapa e inteligente te has convertido, estuviste con tu hermano,  que era lo que yo quería,  aunque me doliera que no estuvierais conmigo. ¿Alguna pregunta más?
-Sí, cuando volviste a ser pirata ¿te costo mucho encontrar una tripulación?
-No, en España yo ya tenía mis propios comerciantes/piratas. Lo que más costo fue que me dejaran de llamar por el apellido de tu padre pero como puedes ver aun lo hacen.
-¿ Como querías que te llamarán? 
- Capitana Santillana. O simplemente capitana,  pero nada, siempre era Capitana Everdeen. Bueno ahora soy yo la que quiere saber sobre ti.
-No hay mucho que saber.
-Si que lo hay. A ver dime ¿tiene amigos?
- Si, mi mejor amiga es Annie, es la hija del consejero de papa, y bueno Finnick, es hijo de Lord Odair.
- O ese chico me suena, bueno más su padre que él,  era muy guapo con el pelo color bronce y unos ojos caramelo.
- Su hijo es una copia pero con los ojos verde mar.
-Cuéntame sobre Annie, como es, que hacíais...
- Annie es una chica hiperactiva, no para, le encanta la moda, ella es la que siempre elige mis vestidos, por cierto le encanta el vestido que diseño el tío, tiene la misma edad que yo lo que pasa es que ella nació antes, es más alta que yo,  es pelirroja y con los ojos verde agua, preciosos,  grandes, expresivos... Dios la echo mucho de menos, siempre andábamos gastandoles bromas a los chicos, osea, a John y a Finnick.
-Hablame sobre John por favor.
- John está guapísimo,  mamá.  Es muy alto, me saca tranquilamente dos cabezas, es de espalda ancha y de cintura y cadera estrecha,  tiene muy buena forma física,  tiene el cabello y los ojos igual que yo pero las facciones son como las de papá, resumiendo una copia de papa pero más joven, lo que más tiene como tú es la forma de los labios, son más gruesos que los de papá, y eso lo hace aún más atractivo.
-¿Muchas pretendientes? - dice riéndose.
- Sí -me río - en todas las fiestas me clavan cuchillos con la mirada muchas chicas, todo hay que decirlo, bailo con los dos hombres más guapos que hay en el mercado- y entonces mi madre ya no puede parar de reir- ¿QUEEE?  Es verdad, el resto son menos apuestos, pero yo creo que ya se con quién acabará.- y me callo, y mi madre me mira seria.
- Dime quién.
-No.
- Si, va, dímelo, quiero saber quién le ha robado el corazón a tu hermano.
- Pues es una chica muy inteligente,  rubia, con ojos muy claros, casi no le hace ni caso a John, siempre está leyendo y pasando de él,  no se si ya se le declaró, pero si lo hizo le dio calabazas. Me gusta, es buena chica, es muy amable. Es nacida alli en Cuba pero su familia es toda de Europa.
-¿Y tu prometido?
La cara me cambia, no quiero hablar de ese idiota, es un machista, narcisista,  se piensa que me casaré con él,  pues ya puede esperar sentado, porque yo no voy a ir.
-No tengo prometido.
-Dijiste que si.
- Para mi ese chico se puede ir al infiernos y no volver nunca.
- No digas eso.
- Mamá, me beso sin mi permiso y encima lo hace mal, me pego y lo peor de todo me llamo puta. ¿Me has oído? ¡ PUTA! A mí no me habla así nadie, todo por haberme puesto un vestido, el que diseño el tío Michael.
- ¿Como sabes que besa mal?- me mira alzando las cejas- que yo sepa no te has besado con nadie más, ¿ o si?
Ups... Me ha pillado.
-¿Solo te interesa si me he besado con otro? Te estoy diciendo que me pego y me llamo puta.
- Y tú seguro que le pegaste un buen rodillazo en los huesvs y le soltaste una de esas perlas que salen por tu boca cada vez que te enfadas,  ¿ o me equivoco?
- No, no te equivocas.
-¿ Con quién más te has besado para que tengas que comparar?
Se que si se lo digo se va a reír de mi, y me dirá ya lo sabia, se te nota, yo sabía que a cabarias así. ...
- Con Eric.
-¡¿ENSERIO?! ¿Cuando? ¿Como?
- La primera vez fue en el baile en el que Peter me llamo eso, bueno está bien me llamo eso porque justo cuando él venia y Eric se puso hablar conmigo y de golpe me beso, Peter lo separo de mi estrellándolo contra el suelo, pero Eric pudo con él.
-¿ Y que tal, como besa?
- Mamá, parece que tengas mi edad, no 25 años más.
- A ver, soy pirata, yo el sentido de la vergüenza la perdí con mi primera borrachera de ron a los 17.
- Información no deseada.
- Va dime.
- Bien.- digo con indiferencia.
-¿Bien de, bueno no está mal o bien de , no veas como besa este chico?
- La segunda opción- digo por lo bajo, en un susurro.
-¿Qué?  no te he oido- dice pícaramente.
- ¡¡¡¡Qué si!!!! Que besa como los ángeles,  me lleva al cielo, solo nos separamos por falta de aire.
-¿ Os habéis besado más veces?- dice sorprendida, como le diga que duermo en la misma cama que él, o mata a Andrew,  mata a Eric o a mí me trae a su barco.
- Si, siempre me besa él.
-Tendré que hablar con él.
Se levanta de la cama, y empieza a dar vueltas por la habitación,  debe estar pensando en algo. Pican en la puerta.
- Capitana, nos informan que en dos días hay una fiesta en honor al nombramiento de su hijo.
-Informador.
- Clara Trinket.
- Gracias Boggs.
Boggs es el segundo al mando, es muy fuerte, alto, es de piel morena, ojos negros. Tiene una voz potente pero a mí madre le habla con ternura, admiración.  Como si fuera de su propia familia.
-¿Clara?- mi madre asiente- ¿ Mi Clara?
- Si tu institutriz. Es mi informadora, me cuenta todo, me envía el informe cada dos semanas excepto en casos especiales, entonces intenta que me lleguen lo más rápido posible. Cariño dile a Andrew que ponga rumbo a L'Habana.
-¿Qué?
- Vamos a ir a esa fiesta.
- No, no, no.
-Si, si, si.
-Mamá no quiero volver a ver a Peter, me obligará a que me case con él.
- No si antes le presentas a tu marido.
- Me das miedo. ¿ Quién será mi supuesto marido?
- Lo tengo que pensar. Venga ves y dile a Andrew.
- ¡Ah! Por cierto, Amdrew me ha dicho que me tienes que darme algo.
-Es verdad.
Empieza a rebuscar por toda la habitación hasta que encuentra una caja no muy grande de madera pintada.
-¿Que hay dentro?- le pregunto.
- No te lo voy a decir,  esto es de Andrew,  si alguien te tiene que decir algo es él. Venga para tu barco.

Salgo del camarote y subo a cubierta, busco a Will con la mirada, lo encuentro con su madre, ella tiene entre sus manos el medallon que una vez fue del padre de Will.
- ¡¡WILL!! NOS VAMOS- le grito.
Veo como su madre le da  un beso rápido al medallon  y otro a Will en la frente. Él viene corriendo donde estoy yo.
- ¿ Ya has acabado?
-De momento si.
- ¿ Que es esa caja?
- Es para Andrew.
- Aaaa,  vale. Bueno vamos.
Cuando subimos al Sinsajo nos recibe Andrew.
- Dame la caja- se la doy.
- Andrew, mi madre dice que cambies de rumbo, vamos a L'Habana.
- Tu madre está loca. Nos están buscando por todo el océano,  nos hemos llevado a la hija del gobernador, no puedo aparecer ahí con la niña y la madre. No, no, no me niego.
- Ya se lo he dicho yo pero no me ha hecho caso.
-Bueno,  si lo dice tu madre es por algo. CAMBIAMOS DE RUMBO.  VAMOS A L'HABANA. Preciosa solo tardaremos 2 días en llegar, ellos ya no te podrán reclamar.
-¿Perdón?
- El trato que hizo el muchacho, dijo que si en 5 días no pagaban el rescate te quedarías con nosotros,  ya han pasado 2, tardaremos otros 2 en llegar, el día que te presente ya habrán pasado 5.
-SIIIIIIII- grito de felicidad. Me pongo a saltar.  No tendré que casarme con el odioso de Peter.
-Bueno ¿ y para que volvemos?
- Una fiesta en honor al nombramiento de mi hermano.
-¿ Por eso tenemos que ir?
-Si.
- Voy a hablar con tu madre.
Coge el bote en el que veníamos Will y yo.
-Katherine podemos hablar.-es Eric.
-Sí.
Me coge del brazo y me lleva a nuestro camarote. La cama esta hecha, todo recogido... Des de luego es más ordenado él que yo.
Va despeinado, con la barba de unos días,  con la camisa de color crema y los pantalones verde oliva con las botas marrones, el cinturón con la espada justo en la cadera....madre mía.
- Katherine yo...
- Necesito que me hagas un favor que sé que vas a estar encantado de cumplir.
- Si es acostarme contigo ya estamos tardando- dice pícaramente.
-¡¡ Eric!!- le pego en el hombro- esto es serio- lo miro con el ceño fruncido.
- No hagas eso, te saldrán arrugas antes, y estás más guapa con una sonrisa- cuando me dice eso me pongo roja, no me gustan que me digan piropos.
-Necesito que hagas de mi marido en la fiesta de mi herma...
- Encatado- sonríe triunfante.
- ¿Sabes lo que significa?
- Qué tendremos que practicar, ven aquí...
- No, comportate bien, no seas muy grosero,  y por lo que más quieras no hagas enfadar a mí madre. Después te dejaré que me des algún beso si Peter se acerca, solo si se acerca, ¿ entendido?
-Sí, mi amor.
-Tranquilo que no tienes que actuar hasta dentro de tres días.
- No estaba actuando. Kate no lo ves, yo de verdad te quiero, he sido un mujeriego hasta ahora pero enserio , yo estoy enamorado de ti des de hace mucho tiempo.
-Y...yo...yo... Eric no se que decir, es que ya te lo dije antes,  no quiero estar con nadie...
- ¿ A no? Pues con Will y Gonzalo parece que si.- me dice enfadado.
- Solo son mis amigos, y además no tengo por que darte ninguna explicación. Tú y yo no somos nada más que amigos, si dormimos juntos, pero ya está,  no hay nada más.
- Para mi si que lo hay.
Me mira a los ojos y los veo cristalinos, llenos de tristeza, enfado, dolidos. Gira bruscamente y empieza a marcharse.
-Eric... Yo lo siento... - voy corriendo detrás de él,  lo cojo por la manga.- Eric no quise decir eso, por favor Eric escúchame.
- Solo soy el marido de pega, el actor, lo has dejado muy claro.
Y de un movimiento brusco suelta de mi agarre y se marcha por la puerta.

Mierda,  Kate, mierda. ¿ Qué has hecho? ¿ Tanto te cuesta reconocer que te atrae, no sólo físicamente,  sino también por como es? De verdad que no me entiendo ni yo misma.