La Verdad Sobre Harry Potter - TERMINADA

CAPÍTULO LXXV

Al final de la madrugada cada uno fue yéndose a su casa por el cansancio.

Fue en la habitación de Charlie donde estuvo el problema. El joven descansaba cuando un dolor lo despertó.

-¡Mamá!- gritó con sus fuerzas

El joven se retorcía de dolor y sostenía su vientre sin aplicar tanta presión, lloraba como nunca había recordado hacerlo

-Oh cariño, Merlín- exclamó Molly al entrar y ver el estado de su hijo

Bella entró después de la otra mujer

-Duele mamá, duele mucho- dijo entre quejidos

-Hay que llevarlo a San Mungo- dijo Molly alterada

-No, el bebé no necesita a un médico, necesita a su otro padre- dijo Bella

-No, no, no, por favor- suplicaba Charlie

-Lo lamento pero pienso en tu bebé- dijo Bella

-Ve por Malfoy- dijo Molly quien estaba sentada a lado de su hijo acariciándole el cabello

-Ayuden a mi bebé- suplicó Charlie

Bella salió corriendo de la habitación, llegó a la chimenea y lanzando Polvos Flu, despareció por esta. Llegó a la Mansión Malfoy encontrándose a Lucius dormido en el sofá

-Como si no hubieran más habitaciones- susurró para si misma- ¡Hey! ¡Malfoy!- gritó Bella lanzándole un chorro de agua

Lucius se levantó alterado con varita a en mano

-¡Estás loca!- exclamó el rubio lanzándose un hechizo de secado

-Es el bebé, te necesitan- dijo Bella

-Mi magia- susurró Lucius

Ambos sin decir más desaparecieron por la chimenea, Draco que estaba escondido en las escaleras simplemente limpio las lágrimas de sus mejillas y retomó su camino hacia el piso superior.

Bella guió a Lucius por la casa, el rubio sentía su corazón acelerado con miedo, con forme avanzaban, el llanto se escuchaba peor.

Lucius terminó de llegar casi corriendo y entró a la habitación. Molly se puso de pie al verlo, el rubio sin decir nada se sentó donde antes estaba la mujer

-No. No me toques- soltó Charlie

-Déjenos solos- dijo Lucius a las mujeres

-No te dejaré con mi hijo- dijo Molly molesta

-¿Quieres que tu hijo y nieto estén bien?- cuestionó Lucius- Me importa poco si te agrado o no, esto no se trata de ti ni de mi- agregó

-Mamá, por favor- susurró Charlie

Bella técnicamente jaló a Molly fuera del cuarto y cerró la puerta

Lucius sentó a Charlie y se colocó detrás de él, el menor quedó entre las piernas del mayor, Lucius colocó sus manos sobre las de Charlie que seguían sobre el bebé.

Charlie pudo suspirar con alivio

-Te odio- susurró el menor con cansancio

-Lo siento tanto, lo siento. No tengo perdón, hice todo mal- dijo Lucius con debilidad

-Lo más asqueroso es que me enamoré- dijo Charlie con debilidad

-Lo siento- susurró Lucius

Charlie continuo llorando hasta dormirse, Lucius los acomodó de cucharilla sin soltarlo y horas después de vela el sueño le ganó