In Love with an Idol?- P. Sh.

Cap 14

Unas horas antes~

– ¿Entonces de qué quería hablar conmigo, señor Lim?– Yeonjin pregunta al ver a su jefe sentado frente a ella con una mirada nerviosa.

El CEO algo nervioso vió su teléfono, para llamar a alguien, después de unos segundos esa persona llegó, colocándose al costado de Shin, sorprendiendola aún más.

Choi Yurim...

El rostro de la Pelinegra cambia rápidamente a uno confundido y molesto, al ver a su rival al frente suyo junto con su CEO, sonriendo le como si fuera lo más normal del mundo.

– ¿Qué hace ella aquí?– Yeonjin preguntó con un tono brusco, causando que la sonrisa hipócrita que le estaba dando Choi desapareciera y su jefe suspirara.

– Bien iré directamente al grano señorita Shin, necesito que ustedes dos trabajen juntas en su nuevo libro– Explicó Lim– Para ell-

Yeonjin lo interrumpió levantándose agresivamente de su lugar, mientras recogía sus cosas.

– No lo haré, ni crea que voy a hacer ésto, no con ella– Enfrentó a los dos, mientras la castaña de cabello largo la miraba con burla– Dígame algo, ¿Por qué hace ésto señor Lim? No veo la razón de que de pronto me haga trabajar con Choi.

Su Jefe se quedó mudo y cuando estaba por hablar la castaña interrumpió.

– Oh vamos, Shin, ¿Aún sigues resentida por todo lo que te hice?– Yurim empezó a reír–  Al parecer si, se nota que aún eres una chiquilla inmadura, que se enoja por una cosa tan pequeña.

Yeon apretó los puños mientras observaba todo lo que hacía la contraria, ¿Quién se creía esa hipócrita, para decir algo como eso?

– ¿Chiquilla inmadura? Já, mira quién habla Choi – La Pelinegra soltó sarcásticamente mientras negaba con ironía– Yo no soy la que casi le arruinó la vida y reputación a su mejor amiga, solo por qué estaba celosa de que su novio fuera un amigo muy cercano a ella.

Yurim apretó la mandíbula con rabia.

– ¡Serás un– Antes de que insultara a Yeonjin el CEO la callo con una mirada fría y sería.

– ¡Ya basta las dos! Estamos en un lugar público, tengan algo de consideración y más tu Yeonjin.

"Ésto no puede ser" Pensó con decepción.

Ya artá de todo ésto, Yeonjin salé de la cafetería con una gran operación en el pecho, la cual era acomoañada por la irá y tristeza que sentía en ese momento.

Se hiba ignorando los llamados de su Jefe y las risas que soltaba la castaña, hasta que escucho lo que más odiaba en toda su vida, que la amenazarán de tal forma.

– ¡Shin Yeonjin, si te vas ahora mismo, ya sabrás las consecuencias!

Se detuvo, pero no sé arrepentiría de lo que hiba a hacer en éstos momentos.

– ¡Sabe algo, haga lo que quiera!, ¡Por qué yo renuncio!– Se sintió libre al decir eso, como si un peso se hubiera liberado de encima y decidió jugar un poco con fuego– No seguiré en una jodida editorial, que no valora todo mi trabajo y que no reconoce que si no fuera por ellos o por mí, seguiría en la ruina.

Y sin más Shin Yeonjin se fue de ahí con ganas de llorar después de hacer todo eso, pero ella sabía que valía la pena dejar es editorial y empezar buscar otra que si la respete, valore y reconozca.

Aunque no hiba a ser muy difícil, pues gracias a su éxito y gran talento, tenía un montón de propuestas de varias editoriales más reconocidas y buenas en su trabajo, que estaban dispuestos a respetar toda us ideales y no obligarla a hacer algo que no quiere.

Pero en estos momentos no quiere hacer nada más que llorar por lo humillada que se sintió durante años y no hizo nada, por el temor a perder todo por lo que trabajó y sueños, ya estaba cansada de todo y no aguantaba más, lo de hoy fue la gota que derramó el vaso, no hiba soportar más de ese abuso de parte de su ex jodido CEO.

Sin la noción del tiempo, termino llorando a mares debajo de un árbol en el parque de la capital de JeJu, hasta que darse dormida por un largo tiempo, cuando despertó pudo encontrarse con Heeseung y Jay que la miraban con rostros preocupados y al verla la abrazaron, por qué al parecer noteron que había estado llorando demasiado.

La consolaron mientras dejaban que ella les contará todo lo sucedido, pero de un momento a otro Yeonjin se empezó a sentir mareada y termino desvaneciéndose en los brazos de Jay, en ese instante sintieron toda su ropa mojada por toda la lluvia y su frente ardía en fiebre.

Rápidamente llamaron a su manager comunicandole que la habían encontrado luego de una larga búsqueda y que ahora la tenían que llevar con urgencia a su hogar, ya que Shin se encontraba en un estado delicado, Heeseung corrió junto a su manager a abrir la puerta de la camioneta polarizada, suerte que nadie parecía prestarles atención a estás horas, Jay como pudo la llevo en brazos hasta dejarla adentro.

Eso fue hasta que llegaron, quedando en frente de la casa.

– Bien, Jongseon tu te encargas de cargarla y yo abrió la puerta, ¿Ok?– Heeseung indicó tomando las llaves para abrir la puerta.

Jay inmediatamente asintió tratando de que la Pelinegra no se callera, está era liviana, sin embargó al parecer Park estaba perdiendo un poco de energía al estar ya así un buen rato con ella.

– Sí hyung entiendo, pero abre ya la puerta, ya casi no tengo fuerza– Jay suspiró aliviado una vez que el mayor abrió la puerta dejándolos pasar.

Y de esa manera todo sucedió.

Tal vez Yeonjin sería interrogada al despertar, pero necesitaba descansar justo ahora, para poder recuperar energías.