Daylight | Max Verstappen

Capítulo Dos

Lunes, 31 de Octubre de 2022
12:45 PM
Ciudad de México, México.

-¡Mierda Melissa! ¡Si sigues manejando así nos van a multar!

-¡Te dije que no la dejaras manejar! ¡¿Por qué nadie me hace caso nunca?!

-¡¿QUIEREN CALLARSE LAS DOS?! ME PONEN LOS NERVIOS DE PUNTA, LA PUTA MADRE.

-Melissa Pimentel Mejía, si haces que nos multen te voy a matar.

-¿No te preocupa que esté sufriendo un ataque de ansiedad? No te mames Daniela.

-No es un ataque de ansiedad pendeja, es más que claro que está a punto de regresar al restaurante y cortarle la cabeza al güerito...

-¡CÁLLENSE DE UNA PUTA VEZ! Y no tengo nada. Ahora, si no se callan voy a terminar sin paciencia y con el carro en la banqueta.

Paz. Desde que había subido al asiento del conductor no había conocido la paz. Bueno, desde ayer en la tarde, cuando Daniela me había convencido de ir a la discoteca, desde entonces no había conocido la paz.

Después de manejar lo más rápido posible con el tráfico de la ciudad, llegamos a la universidad, quince minutos antes de que iniciará la clase de Daniela. Un nuevo récord, supongo.

Apago el motor y respiro profundamente, es hasta este momento en que me doy cuenta que tenía mis uñas aferradas al volante. No estaba pasando por un ataque de ansiedad, pero sí que estaba un poco alterada.

-Meli.- Dice Jaqui, haciendo que de un pequeño brinco en mi asiento. Siento la mirada de ambas chicas puestas en mi. Mi paz ha terminado. -¿Estás mejor?

-Define mejor.

-Bueno, creemos que estás mejor por el claro hecho de que ya no estas aferrada al volante.- Ahora es turno de Daniela de hablar. Por la forma en que está sentada pareciera que tiene que entrar a clases.

-No maneje como loca para que tú no entres a clase a tiempo.

-¡Ay, relájate Mamá Melissa!, faltan 10 minutos para que inicie...

-Duras 10 minutos en cruzar todos los edificios pendeja.

-Además, es clase con don Miguel, aparte de llegar tarde el señor deja entrar a todos los que entran tarde. Tranquila.

-Meli, no vienes manejando como loca nada más por Daniela.- Se mete en la conversación Jaqui. Por su mirada se que primero quiere asegurarse de que estoy mejor. -¿Vas a contarnos qué pasó con Max?

Dirijo mi vista hacía el frente y respiro profundo. Decido no guardarme nada y contarles la primera parte de la conversación lo más rápido posible y sin ser interrumpida. Una parte de mi está muy aliviada, pero otra parte está aterrada de contarles sobre la tontada que me mande a hacer.

-...Entonces, Max me pidió ayuda para algo...

-Por favor no me digas que te pidió un favor de aquellos.- Dice Daniela de la nada.

-Cállate tonta, que no ves que ya había agarrado valor.- Le regaña Jaqui.

-¿No te preocupa que le haya pedido algo en contra de sus principios?

-Si, pero no por eso la iba a interrumpir...

-Si me siguen interrumpiendo no les voy a contar lo demás.

Silencio.

-Como les decía, me pidió que le ayudara con una situación... me pidió...