*:・゚✧ *:・゚✧ *:・゚✧ *:・゚✧
»📆«
Durante la cena, Diego no dejaba de recapitular lo extrañamente diferente que se sentía con el paso de las semanas.
"Pues chance y es la depre de que el Machín no te habla". - le decía a Marcelo cuando Diego presentaba repentinos cambios de humor durante el día.
Se enojaba cuando tenía hambre, lloraba cuando tenía hambre.
Básicamente el tener hambre le causaba cualquier cambio repentino de emoción.
Así que dudaba que eso tuviera que ver con Edson.
También, a pesar de dormir más horas, siempre se quedaba dormido en clases.
Con Ochoa, con Messi, con Hernández.
Básicamente con cualquier clase.
Como el día que se quedó dormido en clase de matemáticas; despertó asustado luego de haberse soñado con Edson y dos niños en una situación medio tercermundista.
- ¡Diego Lainez Leyva!- el golpe en su butaca lo hizo despertar.
Javier Hernández, su profesor de Matemáticas, lo miraba al tiempo que el resto de alumnos lo hacían también.
-Y yo que pensaba que los chavos de ahora tenían más aguante, a dormir a su casa, Dieguito. - no faltaron los burlones y Lainez parpadeó un poco para poder despertar.
Siempre con la mirada perdida y la percepción de la realidad bien alterada; ya hasta estaba empezando a preocupar a Marcelo.
-Ya parezco recluso contando los días, van exactamente 57 días, ya casi vas para los 2 meses y nada que superas al corrientazo de Edson.
Y más que preocupar a Marcelo, preocupaba a su familia.
Toda esa divagación mental mientras intentaba no vomitar mirando el plato, fue interrumpida cuando Mauro le llamó la atención.
-Bueno ¿Qué tu nada más piensas quedarte viendo la comida a ver a qué hora le salen pies y se va del plato o qué?- preguntó su hermano mayor logrando que sólo de esa manera Diego le mirara.
-No, no es eso. - negó tratando de no gesticular muchas palabras.
-Entonces ya come o algo, hasta me pone de malas que nomás veas la comida y la estés pique y pique y nada que te la metes a la boca.
-Es que me siento un poquito... Indispuesto. - con algo de repudio alejó un poco el plato y dejó los cubiertos sobre la mesa.
- ¿Indispuesto?
-Amor, ya te he dicho que no me gusta que andes comiendo cochinadas cuando sales de la escuela. - dijo Mary observando a Diego.
-No comí nada. - se limitó a responder.
-Con más razón entonces deberías hacerlo. - instó su madre de manera amorosa mientras acercaba el plato de nueva cuenta a Diego. - ¿O es que acaso piensas despreciar la tortilla española que con tanto amor te preparé? Es para mi bebé el más consentido, es su favorita. - Lainez le regaló una media sonrisa a Mary que correspondió. -Hasta escogí los mejores productos del súper; las papas, la cebolla, el huevo...- y cual perro con un instinto agudo del aroma, pudo sentir a la perfección ese olor desagradable huevo.
-No mames, qué asco. - apenas y alcanzó a decir antes de ponerse de pie empujando por completo la silla de madera.
Y esa fue la gota que derramó el vaso para que sus sospechas comenzaran a tomar sentido.
ESTÁS LEYENDO
𝘈𝘮𝘢𝘳𝘵𝘦 𝘋𝘶𝘦𝘭𝘦 ||𝘌𝘥𝘴𝘰𝘯 𝘈. 𝘹 𝘋𝘪𝘦𝘨𝘰 𝘓.||
Fanfiction61 𝘢𝘤𝘪𝘦𝘳𝘵𝘰𝘴 𝘦𝘯 𝘦𝘭 𝘊𝘖𝘔𝘐𝘗𝘌𝘔𝘚 𝘺 𝘥𝘰𝘴 𝘩𝘰𝘳𝘢𝘴 𝘭𝘪𝘣𝘳𝘦𝘴 𝘢 𝘴𝘰𝘭𝘢𝘴 𝘤𝘰𝘯 𝘌𝘥𝘴𝘰𝘯 𝘵𝘢𝘭 𝘷𝘦𝘻 𝘧𝘶𝘦𝘳𝘰𝘯 𝘭𝘰 𝘱𝘦𝘰𝘳 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘦 𝘱𝘶𝘥𝘰 𝘱𝘢𝘴𝘢𝘳. 𝘖 𝘭𝘰 𝘮𝘦𝘫𝘰𝘳...