SIE7E ||KookV||

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La unificación coreana ha mejorado en gran parte gracias a la participación activa de su primer ministro: Jeon Jungkook. Las diferencias entre ambas Coreas han quedado en el pasado, su reciente unión ha logrado que como país, su economía se haya establecido como una de las mejores del continente asiático y dejando de lado lo político y economía, cada uno de los ciudadanos es libre de transitar libremente; el tema del norte y del sur ya no es importante.

Después de un largo y duro día de trabajo Jungkook se dirigía de vuelta a su casa; se encontraba exhausto, sin embargo una gran sonrisa adornaba su rostro, amaba salir del trabajo para reecontrarse en su hogar con su bello esposo.

Amor sería poco, para describir lo que Jungkook siente por él. Es su máxima adoración; precioso por fuera y tan dulce por dentro. Ahora que carga a su bebé se ha vuelto una masita abrazable.

Antes de llegar a casa hizo una última parada comprando una caja de donas cubiertas de chocolate; eran sus favoritas.

En el jardín se encontraba Nayeon arreglando sus hermosas flores y hablando también con ellas; con cada día que pasaba su salud empeoraba, habia días donde su memoria funcionaba al cien por ciento y días dolorosos para dud hijos donde olvidaba hasta su propio nombre Jungkook apreciaba a su suegra y tenía la esperanza de que llegará a conocer a su hijo; pues su más grande ilusión era ser abuela.

- ¿Son bonitas, verdad?

- Hermosas... -sonríe encantada- Tete me ayudó a plantarlas y ahora ya han florecido

Tete. Ahora así era como llamaba a V. Al principio nadie entendía porque de un momento a otro le había cambiado el nombre a su hijo, pero con el tiempo lo llegaron a aceptar, no querían llevarle la contraria.

- ¿Dónde está Tete?

- En su cuarto -señala- ve a verlo, creo que te ha extrañado

Antes de irse, dejo un beso sobre su frente; era como su segunda madre.

A paso lento y más tranquilo se dirigió hacia la habitación; su esposo estaba a punto de dar a luz, así que para él ya era un poco más difícil trasladarse. Entró en silencio, encontrándolo afuera, en el balcón, sentado con su barriga destapada; de la misma manera camino hacia él, deteniéndose cuando escuchó como conversaba con el bebé.

- Entonces, si un día las siete personas idénticas se encuentran, causarían grandes desastres, el mundo incluso podría llegar a desaparecer

Con una enorme sonrisa adornando su rostro sé recargo en la puerta, logrando hacer un ruido por accidente, llamando así la atención de Taehyung.

- ¿Qué haces ahí Jungkook?

- Lo siento, yo solo te estaba viendo -camina hacia él- ¿Qué es esa historia?

A su lado tomo asiento, atreviéndose a acariciar su barriguita; era una sensación imposible de explicar. 

- Es solo una historia -Taehyung sonrió ante el recuerdo de la primera vez que V se la contó- el abuelo siempre nos la contaba a mi y a Nam antes de ir a la cama -acaricia la mano de Jungkook sobre su vientre- al bebé le gusta esa historia

- ¿Cómo sabes?

- Se mueve cada vez que se la cuento -lo mira- ha estado muy inquieto estos días

- ¿Te molesta?

- No, claro que no -arruga su frente- es como su fuera un presentimiento, es como si ya quisiera salir

- ¿Podrías contar la historia de nuevo? -Kim asiente- también quiero sentirlo