SIE7E ||KookV||

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Un ultimátum. La decision había sido tomado y nadie, ni siquiera el mismo diablo lo haría cambiar de opinión.

- ¿Esa es su respuesta definitiva?

- Si... -asiente- ¿No entiendo por qué tanto lío?, se los deje claro la última vez que nos vimos; no seré parte de un partido poco empático con la situación intrafamiliar de sus miembros, no busco que entiendan mi situación marital, por qué esa solo debe preocuparme a mi

- Es una pena Jungkook

- Por supuesto que si... le dediqué tantos años de mi vida a este partido y ustedes solo me dan la espalda, pero está bien, siempre hay mejores por venir, así que no me queda mas que agradecerles, con su permiso

Por desgracia la pequeña reunión con los senadores se había convertido en una cacería digna de película. Donde los lobos hambrientos corrían tras él dispuestos a rajarle el cuello y quedarse con su cabeza.

El único propósito de la discusión era que exigirle que dejara a Taehyung, estaban en contra de su relación, no lo entendía ¿A caso el hecho de estar o no con el amor de su vida cambiará la situación económica del país?, Corea avanzaba con la unificación, pero los viejos que lo gobernaban se estaban quedando atras.

La influencia de externos hacia el amor que siente por Taehyung quedaba de más; su relación les pertenece solo a ellos, es de ambos y las decisiones a futuro las tomarían juntos. 

- No tienes una idea de lo cansado que estoy... -bufa- realmente lo siento, no pensé que...

La oscuridad de la habitación en la oficina logro extrañarlo; confundido encendió la luz frunciendo el ceño ante su ausencia.

- ¿Taehyung?

E internamente se lamentó maldiciendose a sí mismo en el momento que la silla dió media vuelta; era Hoseok.

- ¿Qué haces tu aquí? -aun temeroso continuo buscando a Taehyung con la mirada- Hoseok...

-¿Buscas al impostor? -se burla- lamento informarte que el muy maldito te dejo

Su corazón colapso cayendo al suelo ante la puñalada que lo atravesó dejándolo sol fuerzas.

- Oh... mi pequeño hermano no debes sentirte mal, él no valía la pena

A punto de perder los estribos, Jungkook tomo una gran bocanada de aire empuñando las manos para no perder su buen juicio.

- Ese embustero, no era mas que maldito vividor que se burló de ti por cuatro años y...

- No estoy para tus malditas bromas Hoseok

Lo único que los separaba era el escritorio, porque de no ser asi Jungkook ya estaría encima de él.

- ¿¡Dónde esta Taehyung!?

- Te dije que se fue

Y explotó. De un jalón lo levanto de la silla rebotándolo contra la pared. La ira se podía ver en sus ojos, estaba ciego atrapado entre el enojo y la confusión.

- ¿Qué fue lo que le hiciste?

- ¿Yo? -eleva la cejas- nada... Cuando me vio entrar solo corrió como una jodida rata de alcantarilla

- ¡Mientes!

Perdía la cordura y con ella no media medida la fuerza con la que apretaba su cuello; lo iba a matar si era necesario.

- Solo una oportunidad más -gruñe contra su rostro- no lo voy a volver a preguntar, necesito, te exijo la verdad me la debes... ¿¡Dónde está Taehyung!?