La pareja de recién casados pasó una semana en Hawaii aguantando a la modelo que rondaba a Katsuki aunque no fue para tanto ya que Kirishima se encargaba de mostrarle que la rubia era solo de él.
Katsuki volvió del trabajo más temprano abriendo paquetes de sus compras online donde seguramente venia más ropa. Y en efectivo era más ropa.
Por otra parte Kirishima se encontraba gruñón, un quirk lo había atacado y lo mandaron a su casa. Se sentía raro sentía que todo le molestaba aunque sabía que Katsuki debería andar en casa ya por su mensaje de que se iba a su departamento ya que no había mucho trabajo hoy.
Llego a su casa y la Rubia lo recibió con la misma efusividad de siempre cosa que a Eijirou no le agrado y la aparto algo brusco dejando desconcertada a Katsuki, solo llevaban un mes de casados y el pelirrojo se comportaba asi?.
Esperen. No era pelirrojo.
-a-azul?-dijo curiosa pero algo dolida por lo que hizo, la aparto fastidiado, su Kirishima le responde a besos y caricias.
-¿T-Te pintaste el cabello?-dijo curiosa pero también vio que los ojos de el chico que amaba ya no eran rojos, si no. Azules.
¿Que estaba pasando?.
-un quirk maldita curiosa-dijo entre gruñidos y esta asintió cabizbaja, ahora entendía pero no le agradaba aquello, era muy... gruñón con ella. No le agradaba demaciado.
-b-bien hay comida en el microondas por si tienes hambre... yo iré a.. probarme una ropa y sacrme fotos en el cuarto, me mandaron ropa para promocionar así que.. eso...-luego llamaría a fatgum para preguntarle cuanto tiempo su amado se quedaría así.
Fue al cuarto cambiándose de ropa u maquillandose solo un poquito probándose los conjuntos que para ella eran muy bonitos realmente.
Se probó una falda a cuadros rosa con una camisa blanca con abertura en medio del pecho pero con cuello hasta arriba y manga larga con peritos blancos siendo muy bonito aquel conjunto, se puso unas botas blancas y unos cuantos accesorios rosas que saco de su propio closet y se saco las fotos mandandoselas a su manager que se las mandaría al encargado de sus redes sociales.
El peliazul entro a al cuarto viendo a Katsuki la cual le parecia muy sexy con es mini falda rosa.
Se acercó y sin pudor se puso a tocar el trasero de la rubia mientras está solo estaba estirada para recoger otro conjunto pero se ganó un masaje de su trasero que la puso nerviosa al instante. Luego de aquello sintió el miembro de su esposo ahora gruñón frotándose en su trasero como si la estuviera embistiendo, aquello sin mentir ya la está a mojando.
-E-Eiji~-dijo sonrojada la rubia son entender mucho pero el película sólo lanzó la ropa a otro lado de su habitación para sentarse en la cama dejando frente a él a la sexy rubia que tenía por esposa, solo quería follarsela para que mentiría no sería ni un poco tierno con la chica.
Se quito su camisa y pantalones frente a ella que lo miraba expectante ya no sabía si seguir el juego o pararlo. Era su Eiji pero aun asi, no era su personalidad de siempre.
El peliazul levanto la falda de la chica y tocó su zona para comprobar algo.
-Estas mojada zorrita...-dijo haciendo que las piernas de la rubia se apretaran entre sí y estas mismas temblaran.
-ow te encanta que traten como una zorra?-pregunto divertido lamaniedose los labios.
-quiero ver esos pechos ven aquí-dijo atrayendola para bajar su camisa dejando ver solo sus pechos empezando a masajearlos con rudeza sacando tanto gemidos de placer como de dolor por parte de la rubia, chupo y mordió un poco los pezones de esta girandola y sentandola en sus piernas le era más fácil toquetear los pechos a Katsuki la cual no sbaia que sentir pero se estaba mojando.
