Cuándo, Dónde y Cómo el Amor Quiera (Freenbecky Versión)

9. Golpes de Calor

- Dios mío qué tarde se me hizo. NUNCA pero nunca más vuelvo a dejar que Nane me convenza de acompañarla a una sesión. NUNCA MÁS – Freen hablaba sola mientras tocaba nerviosa la puerta del departamento de Becky. Le había un mensaje a la rubia contándole que estaba demorada y le preguntó si podía quedarse un rato más con Mon a lo que Rebecca respondió con un simple "encantada".

Volvió a golpear otra vez la puerta, esta vez más fuerza. ¿Acaso se habrán ido a alguna parte? –pensó la morena. En ese momento la puerta se abrió de golpe yyyy una vez más la imagen con la que se encontró Freen la dejo sin palabras.

Rebecca Armstrong. Rebecca usando solamente un top deportivo negro y un pequeño short del mismo color. Su cabello estaba recogido en una cola no muy prolijamente. Sus manos tenían una especie de venda y... ¡Dios mío! - pensó Freen – uno, dos, tres y cuatro. Cuatro perfectos cuadraditos marcados en su estómago- La morena seguía su recorrido - Y esas piernas. Madre mía. Sin tan solo pudiera... Espera ¿cuánto tiempo llevo mirándola?..

- Freen, Freen. ¿Estas bien? - preguntaba Becky pasándole la mano por la cara e interrumpiendo los pensamientos de la morena.

- EEEEE... si, si... yo- yo venía Aaaa... - la morena no podía superar el impacto – Es decir. Vengo a buscar a Moon.

- Si, si claro, pasa, pasa – Becky se corre para dejar pasar a Freen - Perdón por hacerte esperar, es que aproveche que Mon se durmió para hacer un poco de ejercicio – le explicaba señalando la bolsa de box que colgaba en una esquina del departamento.

- ¿Boxeas? – pregunto Freen curiosamente tratando de no mirar a la rubia. Lo pudo superar una vez y quizás si volvía a mirarla esta vez no había salida y terminaría encima de ella en un segundo.

- Mmmm, no lo hago como deporte. Simplemente lo uso para descargarme un poco – contaba Becky mientras se sacaba las vendas de las manos y miraba como Freen observaba todo el lugar.

- ¿Tocas la batería? – pregunta la diseñadora al ver al instrumento en una de las otras esquinas de la sala.

Carajo. Ya veo de donde ha salido tan curiosa la niña. –pensaba Becky.

- ¿Y la guitarra también? – volvía a preguntar Freen, pero esta vez inspeccionando la guitarra eléctrica que Becky tenía junto a la batería.

Si definitivamente ser hermosas y curiosas es del gen Chankimha. AAAAA y no nos olvidemos de la levantadita de cejas. Mortal Kombat: Si Freen Sarocha te levanta su ceja podrá hacer contigo lo que se le plazca.

- Si esteeee bueno, mi mamá era una especie de fanática de la música y bueno yo... ella me enseño de chica.

Freen pudo notar la incomodidad de la rubia al nombrar a su madre y supo que tenía que cambiar rápidamente de tema.

- ¿Dónde está Mon? – preguntó rápidamente

- En su habitación – contestó la rubia agradecida por el cambio de tema – se quedó dormida profundamente después de comer y de empezar a ver a Nemo jajaja. No creo que nunca termine de verla – dijo sonriente Becky recordando su tarde con la niña.

-Becky, no sabes cuanto te agradezco todo esto. La verdad es que estamos pasando por momentos complicados y Pffff- suspiraba la morena – De verdad no sé cómo agradecértelo.

- ¿Estas bien? – pregunta la deportista al ver la cara de preocupada de Freen.

- Si, sí. Bueno no del todo. Estoy cansada, estresada y con mucho trabajo. Me enoja no tener tiempo para mi hija y –y...

- Oye. Tranquila. Te entiendo. Tal vez lo que necesitas es una descarga, como me pasa a mí.. –A Becky se le ocurría una idea – YA SE. VEN, VEN – agarra la mano de Freen delicadamente y la lleva hasta la bolsa de box – Vamos, hazlo – la anima Becky.