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Jerico,un pueblo sumamente maravilloso donde dos mejores amigas estaban totalmente extaciadas de alegría debido a que sus hijas habían nacido el mismo año y con un mes de diferencia,Morticia Addams dio a luz a una pequeña de cabello negro,unos ojos oscuros,piel pálida,con un rostro sin expresión alguna pero eso no le quitaba la belleza que seria dentro de unos años,por su lado su mejor e intrañable amiga,Esther Sinclair trajo a este mundo a una pequeña de cabello rubio,ojos azulados y brillantes tal cual como unos diamantes,una piel clara,oh y como negarlo una sonrisa encantadora,no habia duda que esta pequeña seria una hermosura años más tarde.

Enid Sinclair y Merlina Addams,dos pequeñas que tendrían una amistad inigualable y con una conexión mas que única.

Con el pasar de los años las pequeñas ya habían crecido ambos retoños con solo 6 años teniendo encantados a todo Jerico por la linduras que eran estas dos pequeñas y mas con esa fascinación de estar todo el tiempo juntas,como dos imanes sin despegarse ni un día,ya era rutina para ambas pequeñas ir a la casa de la otra en cuanto despetaran,esta vez Merlina fue la que se despertó primero como de costumbre salio de su hogar para caminar un poco en dirección a la casa de su adorada amiga Enid.

Toco con delicadeza la puerta y espero pacientemente a que esta fuera abierta,mientras tanto intentaba arreglar su ropa para lucir cautivante para la rubia.

-¡Oh Merlina!,Buenos días.-Respondio la señora Sinclar en cuanto abrió la puerta.

-Buenos días Señora Sinclar,¿Niddie esta despierta?-Contesto con educación la pelinegra.

Esther nego con la cabeza pero aun con una sonrisa calida,sabia perfectamente que aun así la morena esperaría pacientemente a que la ojiazul despertace.

-Aun no,¿Que tal si entras y la despiertas tu?,después de todo eres a la única que no le aventara un peluche por despertarla-Comento Esther dejando espacio por la puerta para que la pequeña entrara.

Mientras la Addams solo se limito a responder con su cabeza asistiendo y entrando al hogar con una sonrisa ladina,saludo a toda la familia Sinclar para posteriormente subir las escaleras de la casa en dirección a la habitación de Enid,toco la puerta y llamo con delicadeza unas cuantas veces sin recibir respuesta asi que decidió entrar con cuidado sin hacer mucho ruido.

Dentro de la habitación se encontraba la pequeña rubia,dormida plácidamente con un poco de saliva en su boca y soltando uno que otro ronquido,para Merlina era una vista preciosa,acomodo con delicadeza unos mechones rubios que cubría el rostro de Enid,acaricio su mejilla con sutileza y sonrio un poco,dentro suyo sentía su corazón latir como un loco aunque no sabia que era eso que ella sentía.

-Niddie...Buenos días,ya es de mañana...-Hablo con sutileza mientras aun acariciaba la mejilla de la ojiazul.

Recibio como una respuesta quejidos de la pequeña quien poco a poco abría sus ojitos,aclarando su vista y notando que la pelinegra ya se encontraba en su habitación dándole los buenos días con esa sonrisa que le producía un cosquilleo en su estomaguito.

-Buenos días Merli..~-Jalo del brazo a la morena para atraparla en un abrazo donde la ojiazul escondio su rostro en el cuello de su amiga-Dame 5 minutos más...

La morena solo solto una pequeña risita,le fascinaba ver como la rubia solía hacer reproches para levantarse de la cama era la mejor forma de empezar el día para ella.

Después de un rato con una hermosa forma de despertar la rubia tomo una ducha y se alisto para salir con su amiga,se despidió de su padre,hermanos y su madre todos mirando enternecidos a las dos pequeñas que iban tomadas de la mano para salir al parque un rato ya sea para jugar en los juegos o para sentir solamente la presencia de la otra,esos momentos donde las palabras sobraban para estas dos pequeñas.

Y este día era uno de esos donde las palabras sobraban,ambas estaban juntas en una de las tantas bancas de el parque,la de pecas se encontraba acariciando el cabello rubio de su amiga mientras esta se encontraba recostada en el hombro de la pelinegra,ambas sintiendo la presencia de la otra sin decirce alguna palabra solo su presencia les bastaba para sentirse plenas y en paz completa.

Mientras que todo Jerico se detenia a admirar a esas dos encantadoras pequeñas se notaba una atmósfera increblantable,donde solo eran ellas,el mundo de la otra,se preguntaban si algun dia cuando estas dos crecieran se darían cuenta de que sentian algo mas que una amista la una por la otra.



Friends ♧Wenclair ♧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora