Felix, un sacerdote una vez respetado y venerado en su templo, se encuentra en una situación inesperada cuando es expulsado y enviado a un internado para jóvenes mujeres rebeldes. En este nuevo entorno, Felix se ve inmerso en un mundo completamente...
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Capítulo 2 Misae
Era un desastre con patas.
Su madre, la señora Kang Hyo Chae, nunca lo quiso decir en voz alta, estaba muy segura de que si decía eso su hija se podría convertir en una persona más horrible de lo que ya era. Siempre que tenía la oportunidad cuidaba de su salud, su mente, su vida y de su corazón, quiere lo más importante en el cuidado de las únicas mujeres que tenía como hijas. Empero, era un trabajo constante con esa adolescentes de 18 años, jamás podía hacer realidad sus promesas.
Por su mente pasaban muchas cosas que no eran admisibles para una persona normal.
¿Cuándo empezó todo? No hay una fecha determinada con exactitud, su hermana mayor, Cho Mi Yeon, estaba más que segura de que todo lo que hacía era para llamar la atención y de una terrible manera. Mientras que su hermana del medio, Cho Yi Hyun, creía ciertamente que su hermana tenía ciertos problemas que se debían de tratar antes de que sea tarde. Pero, ¿alguien se puso a pensar en lo que la propia Cho Mi Sae pensaba sobre sus comportamientos rebeldes? No, porque parecía que estaban muy preocupadas en lo que dirán los demás y no en ella respectivamente.
Se sabe a ciencia cierta que haber tenido relaciones sexuales en la iglesia con uno de sus compañeros de catequesis a los 16 años no se veía bien, tampoco es que hacía algo que no conocía. Fue algo que le enseñó la propia Mi Yeon, por todos los ruidos que se escuchaban cuando su madre se iba a trabajar por las noches a traer un poco de comida a la casa.
La señora Hyo Chae creyó que desde ese momento su hija menor empezó a portarse mal.
Sin embargo, es mejor que retrocedamos unos cuantos años para atrás, donde vio con sus propios ojos cómo fue que su padre engañaba a su madre, la forma en que le mentía a su familia y cuando él supo que la pequeña Mi Sae sabía, la llenó de cosas lujosas para que no le dijera nada a su madre. No obstante, a los 10 años lo menos que quieres es que tus padres se separen, abandonen a sus hijas, a su esposa, que se joda la familia y por eso aceptas hacerle caso a tu papá.
No duró mucho.
A los 14 años de la ojicafés, su padre decidió divorciarse de su madre a formar una nueva familia en alguna ciudad lejana de la de ellas. Toda su vida se estuvo maldiciendo mentalmente por haber defendido a su papá en ese entonces, tal vez las cosas serían totalmente diferentes actualmente y no como está yendo en su vida diaria, desde ese día las cosas cambiaron mucho en la forma de pensar y de actuar de la mujer de 14 años.Primero comenzó con probar un poco el cigarro, luego el alcohol y para completar la lista decidió probar la mariguana, que acabó siendo una adicción para ella y sus nervios.
A los 15 fue internada para que se pueda rehabilitar, salió a los 2 meses porque les aseguró a todos ellos que no volvería a suceder y fue la única cosa que cumplió, ya que luego hizo todas las que no podía, como haber tenido sexo en la iglesia con uno de sus compañeros y ser expulsada de ese templo.Mi Yeon al ser la mayor de las hijas de su madre, tomó la decisión de que Cho Mi Sae necesitaba una mejor ayuda que ella o su madre no le podían dar, así que habló con un par de conocidos para acabar con la vida de su hermana menor. Llevándola a un establecimiento religioso de jovencitas rebeldes, en donde conoció a las tres mujeres que serían sus amigas más íntimas; Jo Ji Won, Kim Chae Hyun y Uchinaga Aeri.