La relación de JungKook y TaeHyung años más tarde.
《 Te dije que los finales felices si existían omega 》
Solo eran ellos viviendo y aprendido de la vida como adultos y pareja, como alfa y omega. Con nuevos retos que atravesar y cosas nuevas por ven...
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Era un día normal, el frío estaba en su punto, casi momento de vacaciones, el pequeño DakHo estaba emocionado, tanto él como su padre amaban la Navidad.
TaeHyung estaba en una situación un tanto complicada, tenía una inquietud encima que no lograba entender. Nada estaba mal, su hijo, su alfa, su familia y amigos estaban bien, ¿qué más podía preocuparle? No lo entendía.
El sentimiento de angustia no lo dejaba, como esa sensación molesta que está en tu sistema, un instinto de alerta que avisa que algo está pasando. Pero él simplemente no lograba descubrir que era.
Cuando bajó a desayunar, encontró a su hijo comiendo hot cakes en forma de árbol de navidad, sonrió y besó su negra cabellera.
—Buenos días, papi.
—Buenos días mi corazón.
JungKook apareció en el comedor con un plato extra.
—Tu desayuno.
—Muy espléndido. —respondió con una ligera sonrisa, recibiendo el platillo. —Gracias.
JungKook dejó un beso en sus labios y se sentó a comer junto a su familia.
—Papá Koo, ¿YoonBin puede comer arbolitos conmigo?
—Por supuesto bolita.
—¿Byeol también?
—Hay suficiente para todos, les llevaré unos para el almuerzo. —sonrió. —¿Eso te parece bien?
—Bien papá.
JungKook asintió. Tenía puestos sus ojos en su omega, a través del lazo sentía que algo no andaba bien con su adornado esposo, pero no quería tocar el tema frente a DakHo.
—¿Acabaste bebé? —preguntó dulce.
—Si papi, ¿puedo levantarme?
—Puedes.
DakHo se bajó de su silla con cuidado y corrió fuera del comedor, pero luego regresó y plantó un beso en la rodilla de su padre omega.
—¿Papá bien? —cuestionó ladeando su cabeza.
TaeHyung bajó su vista y sonrió. Su hijo tenía un lazo muy especial con sus padres, incluso podía sentir cuando algo raro pasaba, aunque los adultos preferían bloquear ese tipo de conexión, el olor los delataba cuando algo les preocupaba.
—Si bolita, ve por tus cosas para que vayas a la escuela con papá.
El menor asintió y volvió a irse.
JungKook se levantó y se hincó a lado de su omega.