La relación de JungKook y TaeHyung años más tarde.
《 Te dije que los finales felices si existían omega 》
Solo eran ellos viviendo y aprendido de la vida como adultos y pareja, como alfa y omega. Con nuevos retos que atravesar y cosas nuevas por ven...
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TaeHyung estaba esperando a sus hijos mientras dialogaba con otra omega. El rubio pensó que la mujer sonriente solo se acercaría para hablar sobre el clima o como van los niños, pero dada su sorpresa, se habían metido a una plática más profunda.
—Háblame más de eso TaeHyungie. —pidió con su característica sonrisa del inicio.
¿Cómo alguien podía sonreír tanto?
—Bueno, el divorcio no es un proceso fácil, hablando emocionalmente. —dijo con una mueca. —En el ámbito legal, estando de acuerdo, podremos agilizar los trámites.
—¿Y crees que esa sea la única solución?
TaeHyung suspiró.
—No veo alguna otra Yun. —se sinceró. —Un divorcio no es el fin del mundo, muchos creemos que es algo malo, pero en realidad no es así, es una decisión que tomamos para mejorar o acabar con algo que ya no nos satisface al cien por ciento.
La mujer asintió de acuerdo, y siguieron platicando.
WooYun y DakHo estaban detrás de un arbusto, viendo a su padre hablar muy a gusto con esa señora de sonrisa gigante.
"¿Por qué estamos aquí?"
La pregunta de WooYun distrajo a DakHo.
—Estábamos buscando la pelota que nos dio tío Jin.
El niño mayor abrió la boca y asintió.
"Papá Tae nos espera"
—Iremos para allá...
—Con JungKook un divorcio... por supuesto, de eso es de lo que estoy hablando, ya no estamos bien, entonces se acabó. —habló TaeHyung.
Los niños se quedaron para escuchar. Sus padres siempre dicen que cuando las pláticas son privadas no deben de hacerlo, pero ellos... no estaban escuchando a propósito, solo estaban buscando su pelota, ¿verdad?
—Los niños se sentirán tristes, pero es lo mejor, criarlos en un ambiente donde se finge amor, no es sano.
—TaeHyungie, admiro de verdad tu fortaleza para decírmelo.
—Por supuesto, Yun, es algo que también ya se da por hablado.
—¿De verdad? ¿Y JungKook no puso resistencia?
—Por supuesto que no, estuvo de acuerdo en el segundo uno que se lo planteé.
—Qué adorable familia.
Los niños quedaron expectantes, no sabían el significado de esas palabras, pero... ¿Por qué no se sentía bien acompañadas de sus padres?
