CAPITULO 1

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3 años y medios después

      Mi corazón latía a mil por hora, después de doce horas de vuelo con dos escalas, finalmente me encontraba en Carolina del sur pero todavía me faltaría dos horas y media hasta llegar al campamento. Finalmente volvía al Rowelling Camp pero para ello pasaron tres años y medio, sabía que tenía que volver por eso nada más volver a España me puse a trabajar de media jornada y no fue para nada fácil, pero aquí estoy.

Mis padres me apoyaron totalmente en mi decisión y aportaron su granito de arena.

Todos estos años lo único que hice fue seguir estudiando a la vez que trabajaba, si que parte de mis ahorros serían para entrar en una universidad, pero decidí que era mejor tomarme un año sabático pues aún no tenía claro cuál sería la carrera que debía estudiar. La única cosa en la que estuve enfocada todo este tiempo era volver al campamento.

Quería volver a ver a Alexis, mi querida amiga, la que desde que nos conocimos no dejamos de hablar. Ella vino a España el verano pasado, se podría decir que éramos como uña y carne pero solo nos separaba un océano de por medio.

Y por supuesto, quería volver a ver a Oliver. Bien supe por Alexis, que él y Cyrus volverían con ella al campamento como monitores. Los cuatro fantásticos al completo, pero esta vez como monitores. Alexis, Oliver, Cyrus y yo decidimos nombrarnos así, ocurrencia de Cyrus y su fanatismo con marvel. Aunque gracias a él yo también podía considerarme una fanática de ese universo.

Pero lo cierto era, que Oliver no sabía que yo volvería o al menos eso es lo que me dijo Alexis que no se le había escapado palabra alguna.

En todos estos años hubo idas y venidas. El primer año no podía para de pensar en él, a veces me ponía tan triste que les rogaba a mis padres que me dejaran estudiar en Carolina, algo imposible por su economía, Alexis me informaba que él también estaba igual de triste que yo o eso veía en el instituto o por lo que le contaba Cyrus. El segundo año había semanas en las que no pensaba en él y era un alivio, Alexis ya no me contaba tanto sobre Oliver, lo cual ayudaba, pero me dijo que se apuntó al equipo de natación y que estaba más bueno que el pan. Y este año y medio solo hubo un par de ocasiones en la que hablamos sobre él, solo para recordar aquél verano maravilloso donde los cuatro nos conocimos.

—Muchacha, llegamos .-La voz del conductor del autobús me saco de mis pensamientos.

—Gracias.

      Bajé con una enorme maleta colgada a mis hombros, era más grande que mi cuerpo y eso que el propio campamento nos daría tres cambios de uniforme para todo el verano. Todavía me quedaba diez minutos andando desde la parada del bus, también quedaba un día para que los niños llegaran, por lo visto los monitores debían de estar un día antes para familiarizarse con el lugar.

La calor estaba pegando fuerte ese día, ya estaba sudando. Llamé a mis padres para que supieran que estaba bien, sobretodo para que mi padre Marcos estuviera más tranquilo, era un padre sobreprotector y siempre tenía peleas con mi padre Yon para que no me sobreprotegiera tanto. Los quería muchísimo a los dos.

Me detuve en el cartel que tenía delante 'ROWELLING CAMP un verano para disfrutar' al fin, una enorme sonrisa apareció en mi cara. Ya estaba aquí después de tantos años.

Me adentré para ir directamente a la cabaña de la oficina, tenía que informar mi llegada. Fue todo bastante rápido, di mis datos a la vez que rellenaban todo el resto de papeleo. La señora que se encargaba me dijo cuál era mi cabaña y que era la cuarta monitora en llegar al campamento.

¿Era la cuarta en llegar?, ¿podría ser que...?.

—No me lo puedo creer.-Una agradable voz sonó a mis espaldas.

Tú fuiste mi amor de veranoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora