2 de Julio
Eran las tres de la madrugada, estaba en la cocina de la cafetería en la cual me había colado a hurtadillas, estaba registrando la despensa donde sabía que encontraría algún tipo de chocolate. Me había despertado la ansiedad del periodo que me llegó antes de irme a dormir, no había parado de dar vueltas de un lado para otro y necesitaba con urgencia azúcar en mi sangre.
Se podría considerar que lo que estaba haciendo era un delito por robar comida en mitad de la madrugada, pero mejor eso que cometer un crimen por no poder comer chocolate.
Chocolatinas y un paquete de papas saladas, nadie echaría en falta lo que acababa de coger. Me las comería nada más llegar a mi habitación donde nadie me pudiera ver y acusarme de mis crímenes. Parte de mi estaba feliz por lo que acababa de coger pero estaría plenamente feliz cuando por fin hubiera digerido todo y pudiera dormir felizmente satisfecha.
Estaba por entrar en mi cabaña cuando escuché unas risas leves provenientes del área de descanso, me desvié solo para echar una ojeada para ver de que y de quienes se trataban. Intenté no hacer ruido pero el sonido de mis zapatos pisando con las piedras del suelo eran imposible insonorizar por lo que me paré e hice todo lo posible para ver.
Sofía, robar y espiar no está bien, eres una mala ciudadana. Me dijo mi subconsciente.
Me escondí detrás de un árbol para observar, me sentía como un agente del FBI que estaba espiando a unos ladrones o también como Joe de la serie de YOU. La cosa es que saqué un poco la cabeza y me quedé sorprendida por lo que estaba viendo.
Cyrus y Emily.
Los dos estaban subidos en una mesa charlando con una sonrisa en la cara y la cosa es que estaban sentados muy juntos. ¿Qué demonios estaba pasando aquí?, ¿en qué momento de mi historia me he perdido esta situación? Sofía, espera, estas sacando todo de contexto. ¡No sé nada por lo que no puedo sacar teorías tan precipitadas!
—Gracias, Em.-Cyrus le pasó un brazo por los hombros de la susodicha.
—Ya sabes que me gusta esto.-Emily rodeó la cintura del susodicho con el brazo.
Retrocedí en mis pasos para volverá mi habitación, no quería saber en que terminaba la cosa. Lo que yo tenía en mente era que tanto Cyrus como Alexis terminaran juntos de una vez, pero todo se esta arruinando por estos personajes secundarios que han aparecido. Me estaba volviendo la ansiedad por lo que decidí que era buena idea abrir una de las dos chocolatinas que había cogido.
Cuando tuviera la oportunidad hablaría con uno de estos dos y exigiré saber que demonios sucede. Al igual que con Alexis, quiero saber que es lo que pasa con Noah, sé que es muy mono y todo pero no lo apruebo, me niego.
~
Estaba tomándome mi bol con cereales mientras observaba a mis cuatro objetivos pero solo dos eran los verdaderos. No sabía cómo iniciar la conversación. 'Eh Cyrus, ¿qué hacías anoche con Emily?. Alexis, ¿todo bien con Noah?'. No podía entrar así, quizás debería de haber interrumpido a Cyrus y Emily para que me lo contasen porque ahora si le decía que los había visto me recriminarían que los había estado espiando y si, lo reconozco pero no lo quiero admitir.
—¿Estás bien?.-Giré la cabeza encontrándome los ojos marrones de Oliver.
—Aja.
No le dije nada a Oliver de la conversación que tuvimos las niñas y yo acerca de lo que creían que habían visto entre nosotros dos. Porque tampoco sabía cómo se lo tomaría y si le haría gracia que estuvieran cuchicheando de nosotros cuando no pasaba nada.
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Tú fuiste mi amor de verano
Teen FictionPasas un maravilloso verano en un campamento en Estados Unidos para mejorar tu inglés. Te enamoras de un chico y tienes el mejor amor de verano que nunca tendrás pero... todo tiene un final, el verano siempre se termina. Tres años después decides vo...