capítulo 24

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Gema

Abro los ojos ante el ruido, la luz brillante me ciega haciéndome volver a cerrarlos.

Sigue la luz. Que graciosa, cállate.

Vuelvo a abrir los ojos y esta ves dejo que se acostumbren a la luz, lo primero que veo es a Liz a un lado de la camilla.

-Hija -marie aparece poniéndome una mano en la frente- ¿como te sientes?

Siento la garganta seca, Liz me pasa un vaso de agua, el cuerpo lo siento medio pesado, un medico entra revisando todo y haciéndome preguntas rutinarias.

-Afortunadamente no se dañó ningún órgano vital -concluye su informe

La tarde llega, marie no deja de rondarme y alimentarme, la puerta es abierta dejando ver a Laila y Stefan que trae un choco flan, me sorprendo al verlo dar el primer paso dentro de la habitación.

Trae una muleta bajo el brazo izquierdo y esa misma pierna la tiene vendada, no la apoya. Me sorprende la agilidad que tiene de llevar en una mano el postre y con la otra sostener la muleta.

-¿Que te pasó? -sonrie colocándose a un lado de la cama, ahora que lo veo bien tiene varios golpes en el rostro junto al labio partido.

Laila se acerca saludandome de beso- Según dice se callo por las escaleras

-Asi fue -Stefan replica con amargura, pero cambia su tono de voz cuando vuelve a hablar dirigiéndose a mi- Me ascendieron, ahora soy un oficial.

Lo felicito haciendo que se acerque para abrazarlo, hablamos solo un poco antes de decir que no se pueden quedar mucho tiempo.

Patrick, Alexa y Simón llegan poco después con un oso de peluche y unas galletas, ellos tampoco se quedaron mucho tiempo, el centro religioso tiene a todos ocupados.

Veo a marie moverse de un lado a otro mirando fijamente a Liz que no se molesta en ocultar su exasperación por la mujer mayor.

-Marie yo la puedo cuidar, tu vete sin preocupaciones -Liz intenta convencerla

No sé ha querido ir y tiene que partir a Gales con sara en un par de horas. Al parecer estuve inconsciente un día entero, el cansancio se me acumuló demasiado.

Suspira sonoramente antes de dirigirse a mi- Llamame, come bien y compórtate, te quiero

Asiento y me da un beso en la frente antes de salir. Liz se deja caer en la silla que está a un lado de mi camilla, comienza una plática ordinaria, me mira fijamente.

-No preguntaras por el coronel -afirma con una sonrisita

-No tengo porque hacerlo -contesto con diversión

Es verdad debe de estar trabajando o estando con Rachel, no puedo evitar sentir una opresión en el pecho al pensar en lo último, talvez el efecto de la anestesia se esté pasando.

Aja, más ciego el que no quiere ver. Ey, tu cállate.

-Bueno, te lo diré como quiera -informa acomodándose en su lugar- Ha estado de muy mal humor, el ministro apenas logró sacarlo de aquí. También se dice que le dio una paliza a Stefan.

Las ganas de golpear a Christopher me llegan, maldito cabron aprovechado, lo más seguro es que la paliza haya sido por cierta mujer de ojos azules y no se porque eso me desagrada.

°~°~°

Me despierto escuchando la voz de Liz gritándole a no se quien. Miro la puerta que está entre abierta con mi amiga interponiendosea ante la otra persona para que entre.

Fanfic 6 (Christopher Morgan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora