Condename al Infierno. Afterdeath~♡

Capítulo 33

Narrador

En la sala pequeña vacía de la casa solo se podía escuchar los retumbantes esfuerzos que hacían para intentar entrar en la habitación. Todo lo demás eran gritos desesperados, llamando al peliblanco.

Reaper no paraba de embestir con su cuerpo la madera blanca. Su hombro dolía pero no paró.

No le importo las abolladuras que comenzaban a marcarse en la puerta con cada nuevo golpe. Quería entrar para saber si Geno se encontraba bien.

Hizo un último paso hacía atrás y volvió a golpear.

Porfín pudo sentir caer con todo el peso junto con la puerta. Sintió a Error y Fresh rodearlo para llegar a Geno. Estaba tendido en la alfombra del piso.

-GENO - llamo el menor mientras que Reaper lo hacia a un lado para ver su estado junto con Error.

-Maldición! - el moreno movió levemente su cabeza para buscar heridas por la caída. Revisando que todo estuviera bien se alivió al no encontrar nada.

-Esta bien... esta bien - recalco más para si mismo, dando un suspiro profundo.

Estaba en el piso como si se hubiera desmayado y por mucho Reaper esperaba que fuera eso, no estaba seguro por lo que lo cargo como pudo y entre los tres lo metieron al auto una vez que no daba señales de reaccionar.

Fresh iba en la parte trasera sosteniendo la cabeza de Geno en sus piernas y también lo llamaba con lágrimas en los ojos, pero sin llorar. Error estaba en el asiento del copiloto con Reaper quien manejaba.

Ambos con el corazón en la mano. Preocupados por el estado de Geno.

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Los doctores dijeron que Geno había tenido un ataque de pánico. Efectivamente Reaper habia tenido razón, y el golpe de recordar algunos momentos de su pasado tan de repente, ocasionaron que colapsara finalmente, después de años en las que su mente intento borrar todo lo traumatico, de repente se desbloqueaban dejando en desventaja lo poco estable de su mente. Estaría bien, pero claramente Geno parecía muy inestable.

Sus hermanos se creyeron el que mejoraría; por que así les dijo él.

Pero Reaper podía notarlo tan cansado en todo el camino a casa. Podía ver como disociaba durante cortos lapsos de tiempo mirando por la ventana del auto. Se perdía por largos ratos.

Al llegar a casa de los hermanos, todos entraron agotados eran las 4 de la madrugada así que era de esperarse que fueran directo a sus cuartos para descansar.

Reaper acompaño a Geno al suyo y con una breve mirada que cruzo con Error le dijo que él cuidaría de su hermano.

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El reloj de la pared en la cocina se escuchaba por toda la casa. El silencio le daba más lugar para que fuera escuchado por los pocos que se encontraban despiertos a esas horas donde sólo unos cuantos autos se pasean para ir al trabajo o de los que regresan de el. Nadie había conseguido dormir esa noche, no después de toda la movida de ese día.

Reaper miraba la pared blanca del cuarto de su novio, pensando en toda la mierda que había tenido que pasar el solo. ¿Como afrontarian esto?

¿Que pasaría ahora?

Alejo los pensamientos negativos y suspiro cansado. Se dio la vuelta para ver a su pareja, solo vio su espalda. Delgada, pero no tanto como para parecerse a la de una mujer, seguía siendo un poco más ancha que eso pero era cierto que podía confundirse con la de una. Algo que Reaper notaba más del cuerpo de Geno era su cintura. Tenía una cintura delgada, como un reloj de arena. Era realmente tan pequeño y frágil.

Sabía que no estaba durmiendo. Así que paso su mano por debajo de su brazo y lo abrazo. Puso su cabeza en el pequeño espacio entre su cuello y su hombro para sentirlo más cerca.

Sintió la mano pequeña agarrando la suya con fuerza, como si se estuviera sosteniendo de él. Como si todo se le viniera encima y el fuera el único en poder sostenerlo para no caer.

- Ahora recuerdo....- su vos sonaba rasposa, agotada y silenciosa - ... Mamá solía irse por días de la casa para tomar alcohol... y me dejaba con Error que tenia 5 y Fresh apenas caminaba.

Reaper lo escuchaba atentamente, aún con la cabeza escondida en su cuello.

- .... recuerdo a Fresh llorando por comida... Error con hambre.... solo podía darles pan y agua con temor de que se acabara antes de que volviera, por que siempre cerraba la puerta con llave y nos dejaba sin nada de comida - el corazón del mayor le dolió al escuchar aquel horrible relato de su novio. Sentía tanta tristeza de no haberlo podido proteger de eso -.... y luego volvía... como si nada hubiera pasado.

- Perdón - sus ojos comenzaron a picar y Geno se volteó para verlo algo sorprendido - lamento que hayas tenido que pasar por eso.

Le dolía. Le dolía tanto pensar en la persona que más amaba sufriendo tanto siendo solo un niño y que después de todo eso, siguieran las pesadillas hasta el día de hoy.

Geno sostuvo sus mejillas, haciendo que lo mirase a los ojos.

- No hay nada que pudieras hacer Reaper, ya no importa - hizo una pausa porque también quería llorar - ella ya no me lastimara.

Lo atrajo a sí y lo abrazo. Permitiéndose llorar en su pecho.

Reaper lo abrazaba, también sollozando, fuerte para que lo sintiera con el. Para que supiera que nada lo lastimaria de ahora en adelante mientras él estuviera aquí.

Y es que lo amaba tanto que dolía cuando su amor era lastimado. 

Sentía perfectamente cuando lo dañaban. Su corazón se comprimia al verlo llorar como ahora.

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