Enemys To Married // Saga Enemies (3er libro) (Completo ✅)

CAPÍTULO 6

***LIAM***

Bueeeno... No estoy muy seguro de lo que acaba de pasar la verdad.

- Vaaaale... ¿Eso ha sido bueno o ha sido malo? -pregunto algo confundido.

- Bueno... La verdad es que no estoy muy segura de eso -dice Julia.

- Yo si me dais otros cincuenta dólares os lo explico desde el punto de vista de la psicología -salta Lana con su sonrisa de aprovechada.

Sí, efectivamente, por si no lo habéis pillado, le hemos pagado cincuenta dólares a Lana para que nos siguiera la corriente en lo de hacer como que no me importa Lizzy.

¿Por qué? Bueno, Jack y yo tardamos en convencer a Blake y cuando lo hicimos se lo contamos a Irina, Goldie, Amy y a mi hermana.

Pero estás enseguida vieron un hueco en el plan.

Lana.

Decían que Lizzy probablemente no se diese cuenta de que esto estaba pensado, pero que a Lana no se le escaparía detalle.

De ahí que le preguntásemos que quería y que acabásemos pagándole.

- Ni de coña -le dice Amy. -Me niego.

- Bueno, yo si alguno se ofrece aquí estoy.

- Dejando esto de lado... ¿Cuándo celebramos el cumpleaños de Amy? -exclama Julia con su sonrisa de niña inocente.

- ¡Ah, que lo de ayer no sirve! -exclaman Lana y Blake a la vez. No, si a amargados no les gana nadie.

- ¡Claro que no! ¡No llevo organizándolo tantos meses para nada! ¡Y ya está todo preparado, solo falta decir fechas! -exclama entonces Amy.

- Bien que lo ibas a dejar de lado cuando pasó lo de Blake. -se ríe Irina.

- Joder, porque yo por mi Blaki dejo todo, -dice Amy muy orgullosa. -Y tú por mi, ¿Verdad, amor? -lo último lo añade en dirección a su novio que le sonríe con cariño y esta le da un beso.

Puaj.

Creo que fuera de Lizzy ahora mismo odio el amor.

- Bueno, entonces cuándo. -dice Goldie.

- Yo digo que este finde. -dice Amy.

- ¡Pues este finde fiesta! -grita mi hermana pequeña ilusionada.

- ¡Sí!

Seguimos hablando un rato, de todo un poco, hasta que decido irme.

Aunque me han invitado a comer hoy ya tenía plan.

¿Con quién? Con mis padres.

Hace dos años que no me ven, espero que al menos ellos no me odien tanto como Lizzy.

Aún les quedan un par de años de cárcel, aunque quizá se les reduzca por su buen comportamiento y actitud arrepentida.

Así pues, aquí estoy, frente a ellos, separados por un cristal gordo y comunicándonos mediante un teléfono de cabina.

Mi madre me mira enfadadísima.

Mi padre como siempre reaccionará tal y como ella quiera que se reaccione.

Sin embargo, su enfado no parece el mismo que el de Lizzy.

A ellos al menos se les nota felices.

- Bueeeno... ¡Hola! -digo algo nervioso.

Mi madre trata de hablarme enfadada pero se da cuenta de que no le es posible y acaba sollozando y riñéndome a la vez. Papá a su lado esboza una sonrisita.