[ Cuántas veces, amor, te amé sin mirarte y tal vez sin recuerdo,
sin reconocer tu mirada, sin mirarte... ]
Jane Anderson ha vivido en las sombras, sin ser vista, escondida a los ojos de todos y se ha adaptado bien a ello.
Su vida solitaria da...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
*Vestido de Jane
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
• • • • • •
El fin de semestre se acercaba y con ello la boda de Richard y la madre de Jane. Habían pasado demasiadas cosas en ese mes que transcurrió. Edward Cullen seguía hablándole aunque con el pasar de los días dejó de ser tan raro e invasivo. Era mínimo, pero era algo, aunque Jane seguía reacia a formar un vínculo de amistad con él, Edward era algo que aun no podía descifrar.
Por su parte, se volvió un poco más cercana con Jasper Hale. Fue un hecho que le sorprendió bastante ya que de entre todos los Cullen, con él se sentía más cómoda y definitivamente aquello no se debía al don del vampiro. Jasper ya no usaba su don para calmar la ansiedad de Jane, su peculiar relación se dio naturalmente.
Pero definitivamente con la persona que más le costaba lidiar era con Alice Cullen. Aquella chica era un caso muy particular. No podía decir que le desagradaba del todo ya que le ayudó con los preparativos de la boda de alguna manera y se sentía agradecida por ello, sin embargo Alice parecía no tener botón de apagado. A la segunda semana de su estancia en el Instituto Forks la vampiresa la "adoptó" de alguna manera, siempre veía la oportunidad de hacer que Jane se sentara en la mesa con sus hermanos.
Fue de esa manera que conoció a Rosalie Hale y Emmett Cullen, sin embargo se relacionaba mejor con Emmett que con Rosalie -evidentemente desde su capacidad de relacionarse con la gente-. Hablar con el grandulón era muy fácil, por el contrario la rubia la veía con una seriedad que lograba intimidarla más que Edward. No podía decir si tenía la simpatía de Rosalie o no ya que tenía un trato muy neutro e indiferente con ella.
Gracias a Alice, Jane rápidamente se ganó un apodo entre los alumnos: "La amiga de los Cullen" y con ello que todo el mundo supiera quién era y pudieran identificarla con facilidad.
