CAPÍTULO 31

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Dedicado a laguitarradetodos00 gracias por leer 💕 y perdón por llorar hacerte mucho, pero pues vas a llorar más jaja

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"El culto de Sam"

"El culto de Sam"

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Jane

El típico verano para cualquier adolescente en preparatoria se resumía en salir con tus amigos a pasear en la calle, el centro comercial, en la casa de alguno o simplemente de disfrutar el calor de la temporada. Algunos optan por pasar las vacaciones en alguna casa de campo con sus familiares o bien irse del campamento.

Los veranos en Forks eran totalmente distintos, la diferencia más obvia era que no había sol o cálidas temperaturas, sin embargo hacía menos frío que en invierno y llovía menos que en otoño. Además era la época donde había más turismo.

Los adolescentes pasaban su tiempo en la calidez que ofrecían sus hogares para ver una película, jugar videojuegos o pasar el rato. Algunos otros pasaban la mayor parte del tiempo fuera del pueblo en Port Angeles o Seattle, y los más afortunados salían del estado de vacaciones a un clima más gentil.

Para la gente de la reserva, acostumbrados a las tierras que fueron heredadas de sus antepasados, disfrutaban de la espesura del bosque y la belleza de la naturaleza, y el lugar preferido por muchos era La Push.

Los veranos para Jane eran un merecido y aliviador descanso de la abrumadora escuela. Era un tiempo donde podía disfrutar de estar consigo misma, lejos de la ansiedad e incomodidad de estar alrededor de otra persona.

Pasaba las mañanas aprendiendo a cocinar y por las tardes salía al bosque a leer algún libro, o perfeccionar las técnicas de caza y rastreo que le había enseñado Rick. Ni siquiera sabía porque seguía haciendo aquello, aun cuando él había desaparecido de su vida. La vida en su antiguo remolque era tranquila.

El verano de sus ya cumplidos diecisiete años fue totalmente distinto a todos los demás. Ya no vivía en su remolque y en cambio tenía una habitación tres veces más grande en una casa mucho más grande, y ahora con una familia.

Si bien, al principio se negaba a la idea de que su madre se casará y que tendría una hermana y un hermanastro, con el tiempo terminó aceptandolo. Aunque no haría una fiesta por aquello, aceptarlo ya era un gran avance.

Todas las mañanas despertaba a las nueve am y tenía un desayuno formado -la mayoría de las veces- por panqueques, tocino y huevo. Un desayuno típico estadounidense, un desayuno que no podía tomar cuando vivía en el remolque.

Algunas veces ayudaba a su madre a cuidar a Anne y otras veces lo hacía Collin. Aunque esas veces con el tiempo se estaban volviendo un tanto frecuentes y le costaba admitir que le preocupaba un poco que su madre dejara esa responsabilidad en ella y su hermanastro.

CON LA LUNA EN TUS OJOS - Paul LahoteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora