𝑪𝑩|
Todos los niños morían a ir a Hogwarts, desde pequeños enseñaron que ir a la maravillosa escuela de magia era lo mejor que les podría pasar en la vida, hacer cientos de amigos, aprender uno que otro hechizo, divertirse pero sobre todo en sent...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
S C O R P I U S
Anotaba y borraba en su libreta constantemente, ningún nombre le parecía lo suficientemente bueno, ¿Por que era tan difícil?. Su padre era bueno con los nombres.
Scorpius Hyperion
Tienen su significado y aunque quizá no muchos lo entendieran su nombre era único y él quería uno igual de único para su hermano.
—Hola, Hola.—Tyler se dejó caer en la silla de enfrente a él—¿Cómo estás hoy?
—Bien.—asintió sonriendo a medias—¿Tu?
—Excelente también.—sonrió—¿Qué haces?—estiró su cuello tratando de ver lo que escribía en la libreta—¿Son nombres?...¿De chicos?—levantó una ceja.
—No lo mal pienses.—negó—Tendré un hermano.
—¿Enserio?—Scorpius asintió—Felicidades.
—Gracias.—asintió—Y estoy buscando un buen nombre para él, aun no tengo ninguno que me parezca lo suficientemente bueno.
—Venga que con los puros apellidos que se cargan cualquier nombre es bueno.
—No lo creo.—negó.
—¿Tú te cambiaste el apellido?—Scorpius negó.
—Soy Malfoy Greengrass.
—Interesante.—asintió—Y tu hermano será Malfoy Slytherin.
—Obviamente.—frunció el ceño y Tyler río.
—Déjame ver, quizá pueda ayudarte.—Scorpius extendió su libreta—Jasper, Carter,Noah, Eliaj, Luther—miró a Scorpius—Son buenos nombres.
—No se, aun no me convencen.
—¿Qué tal ... .Zayden?
—Zayden—se encogió de hombros—Zayden Malfoy.—levantó una ceja
—Es bueno.—asintió—También había pensando en Apolo.
—¿Apolo Malfoy?—Scorpius hizo una mueca—No estoy tan seguro.
—Opino que Zayden es un buen nombre.
—Lo es.—asintió—Gracias, iré a escribirle una carta a mamá en no más de dos meses nace y necesito un nombre.
—¿Quieres que te acompañe a dejarla?—pregunto—Tengo unos dulces en mi dormitorio quizá podríamos ya sabes...Subir y comer.
—Claro.—asintió—¿Te veo ahí en una hora?
—Muy bien.—sonrió—Nos vemos.
—Adiós.—sonrió.
Scorpius vio como Tyler se levantó y salió de la biblioteca, tomó un grande suspiro y comenzó a escribir la carta dándole su idea (y de Tyler) del nombre para su hermano.
