La luna de hoy en Buenos Aires es grande y blanca. Otras veces, cuando está más cerca del sol, tiene un tinte amarillo. Más temprano nació al este en el vientre del Río de la Plata. Ahora ya está bien alta. Al termina la noche, buscará una ventana en la miríada de casas y se ausentará de la ciudad inmensa de millones de ventanas que se prenden y se apagan. La luna de hoy brilla fuerte en el fulgor del deseo de una luna, luna blanca o amarilla, una luna y su ventana.
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Unos cuentos para variar
Short StoryPublicaciones de aquí y de allí... del mundo mundial.