¿Qué entendemos cuando escuchamos la palabra MAFIA?
¿Un mundo de flores...? No, es un mundo de muerte, donde hasta el más pequeño gana teniendo una pistola en mano.
Amira es una joven que encuentra un trabajo de niñera, pero lo que ella no sabe es...
Martes por la mañana y ya tengo ganas de matar a alguien. Y no lo debo de buscar porque se encuentra al frente mío, hablando estupideces.
- Señor Kian... ¿me está usted escuchando?
No estoy preparando como será su muerte.
- si, pero nada de lo que usted dice tiene razón, Leah lleva mis apellidos, no lo de ella, Leah es mi hija, yo soy el único que decide sobre su futuro, ningún otro.
- No puede ocultar el sol con un dedo, lo que dejo el señor Wellington deberá Coger Leah apenas cumpla los 18 años.
- Ella lo aceptará si gusta, no podré obligarla y si no tiene nada más que decir, retírese.
Retírese antes que le meta una bala en su craneo.
- Son unos imbeciles, tenía razón el señor Wellington, son una desgracia que se interpusieron en su camino -dice
Sale y hago un llamado.
- No lo dejen salir, llévalo a la bodega.
¿Porque no lo mato de una?
Tocan la puerta y digo que pase.
- Disculpe que lo interrumpa, pero Leah necesita que nos acompañe a comprar los útiles escolares -dice Amira
Miro la hora y son las 11:20 de la mañana, asiento diciéndole que aliste a mi hija. Me voy a duchar no sin antes decirle a mis hombres que preparen el auto.
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Cuando estoy listo, bajo y las espero.
- Dios se demoran tanto -digo viendo mi reloj.
- ¡papi! -viene bajando Leah de la mano de Amira.
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- Vamos -digo
Hace un buen clima aquí en Rusia, llegamos al lugar donde compraremos todo, Amira saca dos hojas.
- Todo esto necesitamos, a excepción lo que está subrayado, eso lo consiguió ya nana.
Leo y es, sobre detergentes. ¿Mi hija limpiará el jardín?
- A cuántos niños le compraremos los útiles escolares.
- Todo esto piden -dice- Es para Leah.
Vaya, un mafioso haciendo compras escolares, ¿que sigue? Hornear pastel...
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- Son 360.50 euros -dice la cajera y le doy mi tarjeta, los empleados suben todo a la Camioneta.
Leah va feliz y Amira también, no se porque s emociona si la que estudiará será Leah.
- Queremos comer -dice Leah- Exijo comer.
- Y quien soy yo, para hacerte caso.
- Mi papi -dice dándome un beso en la mejilla
Amira sonríe y las invito a comer, cuando terminamos Amira lleva a Leah al baño, hasta que el teléfono de ella suena.
- Puede ser una emergencia -digo
Hola Amira soy Xavier, no te olvides de este sábado la fiesta. Será a las 8:00pm te pasaré recogiendo, para ponernos al día.
- Llegamos! -dice Leah
- ¿qué hace con mi teléfono?
- Nada, solo te llego un mensaje, deberías ponerle contraseña -digo
Asiente y mira el mensaje mientras sonríe, pagamos y nos dirigimos a la mansión. Donde Leah va a contarle todo a la nana, mientras yo llevo todo a la biblioteca. Amira se encuentra sacando todo para arreglar la maleta.
- Señor -me llama- Este sábado puedo salir?
- A donde irás? -pregunto
- salida de amigos -dice- procurare llegar temprano al día siguiente.
- tienes el permiso -digo- Procura no llegar ebria.
- Nunca lo haría.
Llego a la bodega principal, donde comienzo a trabajar en los próximos fusiles que saldrán al mercado.
