Danza Invernal (Daemyra)

Rescate y discusión

Hola a todos! Y luego del dramático capítulo anterior que recontra advertí para que no hubieran sorpresas, acá viene otro capítulo

Será un altibajo emocional, así que advertencia también.

PD: Si sienten que los capis van muy rápido culpen a Strovas  que quiere que todos los cap salgan de una porque le da ansiedad jaja

No olviden comentar y votar, besos y abrazos.

Dos largos meses después, la guerra había acabado y el príncipe Daemon por fin podría regresar a su hogar.

Sin embargo, la princesa Rhaenyra poco a poco sucumbía ante las palabras de la reina.

La reina se había enterado de la infidelidad de la princesa, se habían hecho tan cercanas, que la misma princesa se lo había confesado y ella había jurado que la protegería.

Rhaenyra estaba aterrada de que su infidelidad se descubriera.

Sabía que las mujeres infieles tenían una pena muy alta de acuerdo a las leyes de los ándalos. 

Y no solo ella estaba en peligro, sino que también Ser Harwin, con quién no había vuelto a compartir el lecho luego de ese día, de hecho su relación se había vuelto estrictamente fría, era lo mejor para ambos.

Ella no lo quería, y no era justo que él arriesgara su vida por ella.

Otto Hightower por su parte se había enterado hace meses de una noticia preocupante.

Ahora ya no estaba tan de acuerdo con el plan de su hija de hacer que el mismo rey fuera quién ordenara la muerte de la princesa Rhaenyra.

La mano del rey había descubierto algo, el origen de esa niña y era algo que nadie esperaba.

Alicent creía que no habría mayor justicia que hacer que Rhaenyra fuera juzgada frente al septo por adultera, cuando lograra que Rhaenyra confesara sus crímenes, el rey no dudaría. No podía.

Era la honra de su heredero lo que estaría en juego.

Por una vez, Alicent se aprovecharía de lo diferentes que eran las leyes contra las mujeres a diferencia de los hombres.

Mientras el príncipe gozaba de inmunidad, Rhaenyra sería juzgada, y ella disfrutaría de ver caer a esa mocosa mojigata que había parido los hijos que ponían en peligro el que su hijo fuera el heredero.

Cuando la reina se enteró de que el príncipe Daemon volvía, supo que debía actuar rápido, el príncipe era tan impredecible, que bien podía matar el mismo a su esposa, o salvarla, así que entre más rápido Rhaenyra fuera juzgada mejor.

Tenía pocos días para hacerla confesar.

Rhaenyra terminó cediendo ante la reina, creyendo que el rey sería misericordioso con ella pues la reina hablaría en su favor. 

Sin embargo Rhaenyra estuvo muy equivocada si pensó que el rey sería misericordioso.

Cuando ella confesó el rey la miró con decepción, como si algo en él hubiera cambiado.

Rhaenyra no tenía idea que el rey la había estado defendiendo de Alicent, que insistía e insistía en que la princesa era una adultera.

La confesión de Rhaenyra solo hizo que el rey admitiera que Alicent había tenido razón, y que esa muchacha debería ser castigada por adultera.

Rhaenyra se negó a confesar con quién había engañado al príncipe y para que confesara ella fue enviada al septo para que la obligaran a confesar.

La noticia de que la princesa había sido encerrada en el septo por adultera llegó a oídos de todo el reino y Alicent supo que por fin estaba ganando.