Danza Invernal (Daemyra)

Celebración

¡Hola a todos! Acá un nuevo capítulo, y esta vez un capi muy feliz jeje.

No olviden votar y comentar. Besos y abrazos.

Daemon no se sorprendió cuando el rey organizó un banquete para recibir a su esposa. 

Claramente Viserys no quería pensar en que él estaba casado dos veces, y prefería dejar ese tema para después con su consejo. Tampoco le importó que Alicent no quisiera sumarse al evento, y que Aemma pareciera realmente incómoda, el rey solo quería celebrar que el amor de su vida había regresado.

Mientras muchos celebraban, los Hightower permanecían fuera de la celebración pues se sentían ofendidos por dicho evento, y si Daemon era sincero, no los culpaba, el evento era un disparate, sobre todo porque el rey anunció que Rhaenyra era su hija en esa misma celebración y todos se enteraron de golpe que el príncipe heredero se había casado no con una sirvienta del palacio, sino que con su sobrina. Algo normal en los Targaryen, pero que los invitados aún intentaban procesar.

Al ver la incomodidad en Rhaenyra durante ese evento, Daemon hizo todo lo posible para que su esposa no estuviera tan incómoda. 

- Princesa- dijo él acercándose a su esposa y haciendo una reverencia como si fuera un simple plebeyo.

- Mi príncipe- dijo ella nerviosa por su reverencia, levantándose y haciendo una reverencia también.

- Te he dicho que no tienes que hacer eso conmigo- dijo él besando la frente de su esposa que parecía que quería llorar de nervios.

- P-pero tú eres el príncipe- comenzó ella y él la besó para silenciarla antes de que siguiera con una discusión que no quería tener- esa es una linda manera de decirme que no lo vuelva a hacer- dijo ella y él sonrió pegando su frente a su frente.

Daemon tomó la mano de su esposa y la guio a la pista de baile, ella se aferró a él y dejó que él la guiara.

- Estoy bailando con la hija del rey, soy el hombre más afortunado de los 7 reinos- dijo Daemon a su oído y ella sonrió mirándolo a los ojos.

- Te aseguro mi amor, que yo soy una mujer afortunada- dijo ella y él la besó en la frente nuevamente antes de que ambos comenzaran a bailar.

Cuando terminaron de bailar, Aemma tenía los ojos brillantes y aplaudió a la pareja que hizo una reverencia hacia ella. 

- Le entregué mi propia hija a Daemon- dijo Viserys que no sabía como sentirse, básicamente había metido a su hija a la cama de su hermano sin importar cómo él fuera a tratarla, y vaya que sabía que él no había sido un hombre que hiciera todo bien en su matrimonio. 

- Yo le entregaría mi hija a Daemon mil veces más si fuera necesario- dijo Aemma defendiendo a Daemon antes de que Viserys quisiera decir algo en contra de él- Si Alysanne no hubiera sugerido que él fuera vendido como una oveja más al valle, sabes bien que él no habría causado tanto caos, era un niño, igual que  tú, igual que yo - dijo ella y Viserys agachó la mirada.

- Aemma- dijo Viserys sintiéndose culpable- ¿Te arrepientes de nuestro matrimonio?- preguntó Viserys con los ojos brillantes.

- No me arrepiento, sabes bien que te amo- dijo Aemma mirando al rey- Pero tenía miedo Viserys, tú eras un niño y yo lo era aún más- dijo ella mirando a su esposo- No intentes comprenderme, solo quiero que entiendas por qué huí.

- ¿Y si Daemon le hubiera hecho daño a Rhaenyra? Por los dioses Aemma y si él- comenzó Viserys y ella tomó su mano.

- ¿Y si tú me hubieras lastimado cuando regresé?- preguntó ella y él la miró ofendido.