El príncipe Felix proviene de un linaje real destinados a enlazar sus vidas con Dragones, aquellos seres les brindan protección, lealtad y salud. En la mayoría de los casos este enlace ocurre en la niñez, el joven príncipe ha entrado en sus veintes...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
1860.
El reino aún se encontraba de duelo, habían pasado solo dos meses desde que el rey había perecido luego de semanas de agonizar. Un rey joven, amable y benévolo al cual todo su pueblo amaba y en su ausencia aún se hacía sentir la devoción y el duele que el reino guardaba por él. La tristeza parecía recorrer las calles y ni decir lo lúgubre que se había vuelto el castillo sin su presencia.
— ¿Qué tan mal sigue la reina? — En palabras de cualquier otro miembro de la familia el rubio habría creído que era interés por poder, una oportunidad para meter ideas en cabeza ahora que el rey ya no estaba, sin embargo en boca de su primo sabía que aquello era preocupación genuina — He escuchado de sus damas de compañía que ha estado algo... irritable.
—Eso y triste, además de preocupada. — Sorbió su té dejándolo delicadamente sobre el plato de porcelana — De la noche a la mañana paso de ser la reina consorte quien solo debía preocuparse de organizar bailes y caridad para las damas del pueblo a una reina gobernante con un esposo muerto y un hijo posiblemente moribundo.
—Felix... no digas eso. — pudo ver tristeza en los ojos de su castaño primo — Aún hay tiempo para que encuentres... ya sabes, a tu salvación.
—No hay necesidad de disfrazar las cosas, Seungmin — acaricio el dorso de la mano del menor — Sabes que si no obtengo un dragón de aquí a un año, inevitablemente me espera el mismo destino que mi padre.
—Solo es una teoría. Tu padre falleció de motivos diferentes.
—Mi padre falleció porque su dragón murió defendiéndolo en batalla y eso término matándolo a él también, tú más que nadie sabes cómo es el enlace entre sangre real y dragones.
—Yo... tal vez podría prestarte a Changbin para que sea tu dragón hasta que te coronen como el nuevo rey — la tristeza al mencionar aquello hizo doler el alma del pecoso — Yo sacrificaría aquello con tal de que tengas una oportunidad, Lixie.
—Eres afortunado de que Changbin fuera de cacería y no puede escuchar que lo estas ofreciendo — aquello hizo sonrojar al castaño — No sé cómo funciona el enlace pero estoy seguro que lo tuyo con Changbin no solo es una relación de protegido y protector.
—Es complicado — se colocó de pie comenzando a caminar por el jardín. — Binnie existe en mi vida desde que nací, él siempre ha sido mi protector y nuestra relación solo es...
—Algo natural ¿no? — El castaño asintió — Debo confesar que tengo un poco de envidia — se engancho de su brazo para continuar paseando por el jardín — Me gustaría imaginar cómo será mi dragón, si es que este alguna vez aparece.
