Aunque no sea conmigo.

¿Realidad o sueño?

Pov T/n.

Después de tener una conversación larga con mis amigos y hacerles entrar en contexto, esperé a Lizzie para ir juntas a casa. Esta vez iríamos caminando ya que mi moto se había descompuesto.

- ¿Y si vamos al bar y llevas a tu chica? -pregunta Mark. Nunca dejará de molestarme, lo sé.

- No sé si le agradará ese lugar, y no es mi chica. -digo jugando con mi anillo.

- Mira, justo viene por ahí -dice Steve mientras Lizzie se acerca. No puedo evitar sonreír.

- Hey -saluda tiernamente. La quiero abrazar todo el tiempo, se ve muy tierna. - ¿Qué pasó?

- Bueno, queríamos invitarte al bar que queda a una cuadra de aquí -dice Emily sonriente. Lizzie me mira y yo ya lo estoy haciendo. Me da un poco de miedo su reacción dentro de un bar, desde que pasó lo que pasó no ha salido sola ni tampoco ha querido ir a un lugar con mucha gente.

- Chicos, creo que en otro momen...-

- Quiero ir -la miro otra vez y se aferra a mi brazo- Sé que estarás conmigo entonces sé que nada malo pasará -mi corazón quiere salir de mi pecho. Se siente segura conmigo.

- Está bien -le sonrío y luego miro a los chicos que bromeaban con comer palomitas de maíz mientras veían alguna escena de una película. Los quiero. - Vamos a ir caminando, mi moto está muerto ahora mismo -nunca hemos ido a pie en algún lugar y de noche.

- No te preocupes, me siento segura -sus ojos son tan lindos, me pierdo fácilmente.

- Bueno bueno, vamos que nos esperan muchas bebidas -dice Steve cortando nuestras miradas.

Vamos caminando en grupo, los chicos empiezan a cantar mientras Lizzie y yo reímos por algunas desafinaciones. Nunca la he visto disfrutar tanto y me alegra verla de esa manera, me alegra que esté cómoda entre personas que apenas conoce.

La noche está muy agradable, las personas siguen caminando por las calles y yo estoy alrededor de la gente que quiero.

Sin previo aviso siento una mano buscando entrelazar nuestros dedos, todo pasó en un segundo pero lo sentí con lentitud. Era Lizzie, su tacto me hizo sentir una electricidad que recorría por todo mi cuerpo. Acepto la unión de nuestras manos y las ganas de gritar son inmensas.

- Necesito tenerte más cerca, espero no te moleste -dice cerca de mi oído y busco la manera de calmar mi corazón. Ahora no quiero llegar al bar, sé que luego me soltará.

- No me molesta -es lo único que puedo decir. Sentir su mano con la mía, esto es... Esta sensación es increíble. Ahora entiendo eso de sentir mariposas en el estómago.

Con mi dedo pulgar acaricio parte de su pulgar, no lo pensé mucho para ser sincera, sólo lo hice y ya. Seguimos caminando hasta que llegamos a nuestro destino, los chicos ingresan y ella se detiene en seco.

- ¿Me prometes que te quedarás conmigo todo el tiempo? -sus ojos hermosos me miran con un gran miedo.

- Prometo ser una garrapata, estaré pegada a ti toda la noche -digo mientras recibo una risita de su parte. Asiente sin dejar de mirarme y luego ingresamos al lugar.

El bar es agradable, no hay mucha gente desubicada y hay guardias por todos lados. Buscamos a mis amigos y ellos levantan sus manos, ya encontraron una mesa.

- Se perdieron por un momento eh -dice Steve mientras mira nuestras manos, ella aún no me ha soltado y lo agradezco. Me sonrojo y le digo a Lizzie para sentarnos.

- ¿Qué quieren beber chiquitas? -pregunta Mark y luego se da cuenta que también está Steve- Digo, chiquitos -corrige y empezamos a reír por la forma en que lo dijo.