Pov T/n.
Verla frente a mí hace que mi mente crea que estoy enloqueciendo, porque la distancia es parte de nuestras vidas. Ella realmente está aquí.
- ¿Sorpresa? -sus brazos abiertos esperan por mí.
Me lanzo a ella con fuerza, un grito de emoción escapa de mi boca y su risa inunda mi oído.
- Oh Dios mío -cierro los ojos disfrutando de este pequeño momento. Lloro un poco al sentir nuevamente a la persona que estuvo conmigo siempre, a pesar de no estar viviendo cerca. Ella está aquí, ya no me siento tan sola. - No sabes cuánto te he extrañado. -me sigo aferrando a ese abrazo increíble.
- También te he extrañado. Por un momento pensé que no sería bienvenida.
- Es que... -salgo del abrazo y me limpio el rostro con rapidez. - No sabía que vendrías, ¿sabes? Es una gran sorpresa para mí. Eres más que bienvenida. -sonrío mientras la observo. - Ven aquí... -vuelvo a abrazarla. - Me hacías tanta falta. -siento un nudo en la garganta.
- También me hacías falta. Te ves tan preciosa. -su voz se entrecorta, entendiendo que ambas estamos emocionadas.
- Tú también te ves preciosa. -digo en el abrazo. - ¿Por qué no me avisaste que vendrías?
- Porque no sería una sorpresa, tonta. -suelto una risa. Tanta razón tiene.
No sé cuánto tiempo pasó, pero seguíamos abrazadas estando en la entrada de mi casa. Hailee es la mejor amiga del mundo, y que haya tomado la decisión de venir hasta aquí lo confirma aún más.
El sonido de unas pisadas me hacen abrir los ojos, dirijo mi vista al frente.
Un escalofrío, mi corazón acelerándose y la forma en la que mi cuerpo se tensa... No puedo explicarlo. "¿Es un sueño? Tiene que serlo" me digo a mí misma.
Suelto a Hailee con cuidado sin apartar mi mirada de esos ojos verdes que eran mi perdición. Lo siguen siendo.
Se ve un poco castaña, con el cabello más largo, su rostro intacto, sus dedos jugando como siempre por los nervios...
- T/n, tranquila... -escucho a mi amiga decir mientras me doy cuenta que estoy retrocediendo. El dolor del que quise escapar me encontró.
- No... No puede ser -susurro. Sin quererlo, mis ojos se llenan de lágrimas al instante. - Ella no está aquí, ella no... -los ojos de Hailee me desconectan de los otros. Sus manos se colocan en mis mejillas buscando mi atención total.
- Hey, mírame... -parpadeo unas cuantas veces pero aún no logro entender lo que sucede.
- Ella no está aquí, ¿verdad? -mi mirada pasea por el rostro de mi amiga esperando a que me lo confirme. - ¿verdad?
- Por favor, déjame explicarte lo que sucede.. -fruzo el ceño.
- ¿Sabes lo que sucede?, ¿La trajiste contigo? -espero su respuesta pero ella sólo insiste a que me calme.
- T/n, por favor, calma...
- Respóndeme... -tomo sus manos y las alejo de mi rostro con decepción. - ¿Vinieron juntas? -asiente con la cabeza, sus ojos ya no se dirigen a los míos. - ¿Por qué?, ¿ahora son amigas otra vez? -suelto una risa irónica. - No la quiero ver.. Y a ti tampoco.
- Per-
- No. Las. Quiero. Ver. -enojada salgo de allí y voy a mi habitación. - Cierren la puerta cuando se vayan. -grito mientras me quedo encerrada en mi lugar seguro (la habitación).
ESTÁS LEYENDO
Aunque no sea conmigo.
Fanfiction- ¿Estarías dispuesta a sacrificar tu propia felicidad por la de ella? -¡Eso es lo que hago para que ella sea feliz!