Pov T/n.
Ha pasado un mes y medio, todo está tan bien, sigo haciendo ejercicio, acompaño a Lizzie a su trabajo, mis amigos siempre están molestando y ahora es mucho peor porque saben que la rubia me gusta. Les conté que Lizzie me gustaba antes de que se cumpliera un mes, se han emocionado el triple y lo único que deseaban era festejar con mucho alcohol y música, lo hicieron, claro que sí.
Mi relación con la chica de ojos verdes está yendo increíble, estoy pensando pedirle ser mi novia justo hoy, en un restaurante, con buena vista y buena comida.
Lizzie es magia, es luz, ella puede hacerme sentir tantas cosas en un solo segundo. Ella no sólo me gusta... me estoy empezando a enamorar.Los días para mí cambiaron, antes despertaba sola, desayunaba sola, entrenaba sola, compraba cosas para la casa sola... Ahora todo lo hago con la chica más linda que mis ojos pudieron observar.
- Buenos días dormilona -dulces besos en mi rostro me hacen sonreír y con cuidado abro los ojos para acomodarme a la luz que ingresaba por la ventana. Miro el rostro de Lizzie con lentitud, acaricio sus mejillas y me pierdo en sus ojos. - Qué tanto me miras? -pregunta soltando una risita pero sin despegar su mirada de la mía.
- Eres un ángel, ¿sabes? Eres la perfección Elizabeth Olsen -dejo que mis palabras escapen de mi boca sin pensar demasiado. Estoy atrapada en ese color esmeralda. - Me encanta despertar y encontrarte a mi lado, me encanta que me despiertes con besos, me encanta que me sonrías de esa manera, que me mires como lo haces ahora, que me mimes... -murmuro mientras acaricio su mejilla- Te... yo... -no sé si sea correcto decirlo ahora, no quiero incomodarla- ¿Te preparo el desayuno? -una pregunta muy estúpida.
- ¿Qué te pasa el día de hoy? Estás más tierna y nerviosa, ¿qué pasa por esa linda cabeza? -levanta una ceja y espera mi respuesta.
- ¿No puedo ser más tierna? -me hago la ofendida.
- Claro que puedes, sólo me parece, no lo sé, no es raro porque siempre eres tierna, sólo que hoy...
- Estoy más tierna, eso es todo -interrumpo- Ahora, me das un beso en los labios que lo necesito -estiro mis labios y ésta suelta una risita para luego besarme. Sus labios son tan suaves y sus besos son tan adictivos.
Todavía no hemos estado juntas, hablamos del tema y dijimos que podíamos esperar un poco más. Ambas somos muy de tener que conocer bien a alguien antes de llegar a ese punto ultra importante. Ella me respeta, yo igual.
- Yo prepararé el desayuno -dice mientras se aleja- Hoy tengo que quedarme con Hailee un poco más tarde porque la mujer que la ayudaba no estará allí.
- Gracias por el desayuno desde ya -dejo la cama y la abrazo antes de que se retire de la habitación- Hoy quiero llevarte a cenar, ¿aceptas?
- A cenar, ¿dónde? -para ella no era extraño ir a cenar, lo que me ayuda a organizar bien todo.
- Como te he llevado a varios lugares...
- ¿Nuevo lugar? -me interrumpe y asiento sonriente. En este tiempo la he llevado a muchos lugares buenos para comer.
- Necesito que vayas cómoda, o como tú quieras ir -digo mientras camino fuera de la habitación, ésta me sigue para ir a la cocina.
- ¿Tengo que ir muy elegante? -pregunta, tomando dos tazas y servir el café que había hecho.
- Lizzie, todo lo que te pongas te queda perfecto, así que, puedes ir como tú quieras -la miro con ojos de amor. Ya no puedo ocultar esto.
- Tus ojitos brillan mucho el día de hoy -se acerca y me pasa la taza de café. - ¿Hay algo que quieras contarme? -inclina un poco la cabeza y entrecierra sus ojos. Niego con la cabeza y bebo un poco de mi café para que no se note mi sonrisa.

ESTÁS LEYENDO
Aunque no sea conmigo.
Fanfiction- ¿Estarías dispuesta a sacrificar tu propia felicidad por la de ella? -¡Eso es lo que hago para que ella sea feliz!