𝙻𝚊 ú𝚕𝚝𝚒𝚖𝚊 𝚖𝚞𝚓𝚎𝚛 𝚄𝚌𝚑𝚒𝚑𝚊|| 𝙽𝚊𝚛𝚞𝚝𝚘

XVI

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Y los meses pasaron con rapidez, muchas cosas acontecieron en la organización, muchos de mis compañeros estuvieron al borde de la muerte.

Nuestro líder, Pain, me envió para buscar a Hidan y a Kakuzu, pues se sospechaba que alguien podría intervenir y ante cualquier eventualidad podría ayudarlos.

"Caminaba por el bosque buscando a Hidan y a Kakuzu, a lo lejos pude divisar un gran pozo llenó de rocas, me acerqué a el y ví que la tierra demostraba que fué removida recientemente. Para poder tener más información amplíe mi rango para poder detectar los chakras, me sorprendió sentir el de Hidan ahí dentro.

—¡Hidan!—grité en dirección al pozo.
—¿_____, eres tú?—gritó de igual forma. Al confirmar que estaba ahí comencé a remover las rocas con mucho esfuerzo, tras algunos intentos de forcejeo pude sacar todas las rocas ayudándome con mi chakra. En el fondo pude apreciar que Hidan estaba descuartizado. Salté hacia allí y llevé cada una de sus partes a la superficie.

Cosí sus extremidades y las uní con el ninjutsu médico.
—Deberías ser un poco más agradecido—murmuré rodando los ojos—si no fuera por mi ya estarías muerto—mentira, había sido idea de Pain.
—Gracias, _____—dijo con ironía—te debo un favor.—Me miró y comenzó a caminar, si que se recupera rápido.

—¿Cómo carajo te viste acorralado a tal punto de que te derrotaron?—le pregunté con curiosidad.
—¿Sabés? Es algo que ni siquiera yo lo sé, solo sé que su nombre era Shikamaru.
—Ahí está el problema entonces—murmuré—ese muchacho es de Konoha, pertenece al clan Nara y si no eres tan idiota ya sabrás de que se trata—conté pero Hidan se me quedó viendo, debí suponerlo, no iba a conocer un clan de Konoha por lo ignorante que es—ese clan se destaca por su gran intelecto, no son muy fuertes pero con su inteligencia son capaces de derrotarte... Eres el claro ejemplo.

—No puedo creer que un debilucho como él me derrotó, no paraba de hablar de su maestro muerto que maté, según él se estaba vengando—dijo entre risas burlonas. Levanté las cejas en señal de sorpresa, pobre Shikamaru, debe estar devastado por la muerte de Asuma.

—Los de Konoha son muy sentimentales, les importan mucho las personas con las cuales elijen rodearse. Yo aún le tengo un gran aprecio de Kakashi por más de que estemos en bandos distintos—confesé con una sonrisa melancólica—pero eso es tema para otro día, ahora debemos buscar a Kakuzu

Me adelanté rápidamente cuando sentí el chakra de Kakuzu, pero comencé a escuchar un ruido horriblemente molesto para mis oídos, me guíe mejor por el sonido y me encontré a Naruto de lejos, el cuál no había notado no presencia aún. Naruto estuvo apunto de atacar a Kakuzu con esa técnica desconocida pero me interpuse y con el poco de chakra lo alejé pero no fuí lo suficientemente rápida ya que me impactó de igual forma. Era doloroso, sentía como miles de agujas atravesaban mi cuerpo, quedé aturdida pero me recuperé casi al instante. Le agradecía internamente a Hidan por ayudarme a perfeccionar el ritual de inmortalidad.

—Al parecer nos vemos de nuevo, Naruto—dije jadeante tras recibir su ataque. Él me miró de forma sorpresiva—ya me iba igualmente—me apresuré a avisar. Si me quedaba aquí me asesinarían. Rápidamente me eché a correr sin darles tiempo a reaccionar. Tomé a Kakuzu de su túnica por el camino y lo arrastré.

Corrí en busca de Hidan, el cuál se encontraba paseando muy felizmente por el lugar.

—¡Nos vamos ahora!—exigí corriendo. Hidan me miró confuso pero aún así me siguió. Me frené de golpe al recordar algo muy importante.