En la estación, los policías pasaban de un lado a otro, su trabajo había ido en crecimiento estos últimos días gracias a los últimos asesinatos, gente entraba y salía, los interrogatorios no llegaban a ninguna parte, nadie tenia información de nada o siquiera sospechas, nada. A pesar de ser un pueblo pequeño, nadie era capaz de enterrarse ni de lo más mínimo.
Los primeros en la lista para el interrogatorio era una pareja.
Judy era la encargada de llevar a cabo esta actividad, así que una vez estuvo en aquel cuarto aislado con aquellas personas, se sentó.-Bien, intentaremos hacer esto lo más rápido posible ¿De acuerdo?
A pesar de hablar con suavidad para alivianar un poco el ambiente, no funcionó, la mujer estaba destrozada, mientras que el contrario intentaba tranquilizarla.
-Por supuesto, pregunté- al parecer el hombre era el único que tenía la fuerza de voluntad para hablar.
-En ese casó- se acomodó en la silla para sacar así sacar un par de bolsas de plástico, pero en este caso se enfocaría solo en una. Abrió está para sacar un par de fotos de la víctima -Podria decirme dónde se encontraban aquella noche.
Se sentía mal por hablarles de manera tan fría a la pareja, pero así eran las cosas en la policía, tenías que ser lo más directo y con carácter.
Él señor con barba se hizo un poco para enfrenté, viendo las fotografías de la escena del crimen, lo cual hizo que sintiera un nudo en la garganta, quería llorar, pero tenía que ser fuerte, sujetó la mano de su esposa y respiró profundo.-Era nuestro aniversario de bodas, así que Henry se quedó en casa, como solía hacerlo- acaricio su cuello con su mano desocupado, intentando hacer desaparecer aquella sensación en su garganta.
-Sabe si su hijo tenía algún problema con alguien en el instituto.
-No, él ni siquiera tenía amigos, siempre se la pasaba en su cuarto, sus notas eran decentes, lo único que tenía entendido es que le gustaba una estudiante.
-¿Y quién es esa estudiante?
-Una tal Tara Carpenter- no creyó volver a escuchar ese apellido de nuevo dentro de la comisaría -Su cuarto estaba lleno de fotos de ella.
-¿La acosaba?
-Me gustaría pensar que no, pero mi esposa y yo una vez nos dimos cuenta de que en su teléfono tenía fotos, igual en su computadora y incluso en apuntes la mencionaba, le dijimos que eso estaba mal- paso rápidamente su mano por sus ojos, quitando sus lágrimas -Era necio, simplemente nos ignoró y siguió con su obsesión.
El agarre de la mujer sobre el brazo de su pareja se intensificó, ganándose una mirada de la rubia como del hombre, él cual le acaricio su mano.
-¿Por qué tuvo que morir así?- hablo entre sollozos, y con un par de pausas para poder respirar -Era solo un niño, nuestro niño Felix.
-Lo se Rose, lo sé- el simple hecho de escuchar a su mujer hablar, le había destrozado el corazón, teniendo que abrazarla, para que está llorara en su pecho, mientras que el lo hacía en silencio.
No iba a negar que ver aquella escena le ponía mal, podia entender el dolor por el que estaban pasando aunque ella nunca lo haya experimentado. Para un padre es doloroso la muerte de un hijo, y no importa si el individuo era bueno o malo, es parte de ti como su padre y por ende es imposible no llorar.
Judy acercó las fotografías hacia ella, viéndolas una vez más, era espantoso ver como los cuencas dónde deberían estar sus ojos estaban vacías, dejando solamente grandes manchas de sangre en su lugar, las cuales se escurrían hasta los costados de la cabeza, y digamos que la mueca del cadáver no ayudaba mucho, la boca abierta, de la cual brotaba aquel líquido carmesí gracias a las múltiples apuñaladas en la garganta.
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If I Can't Have Her No One Can - Tamber
FanfictionAmber Freeman siempre ha estado perdidamente enamorada de su mejor amiga Tara Carpenter, quien desde que tiene memoria a estado con ella, en las buenas y las malas. Pero todo dará un giro cuando vea como su querida amiga comienza a acercarse a más g...