If I Can't Have Her No One Can - Tamber

Capitulo 31: Are We Still Friends?

Espero unos segundos en la puerta de aquella residencia, golpeaba la suela de su tenis contra el suelo, silbaba, miraba alrededor mientras mecía su cuerpo, tenía que entretenerse con algo mientras esperaba una respuesta, y dejamos que también le ayudaba a distraerse del estrés que había sentido las anteriores horas.

Dejo de silbar cuando escucho pasos acercándose a la puerta, así que dirigió su mirada hacia ella, la cual fue abierta.

-Buenas Am-

En eso pudo ver cómo la mencionada casi le apuñala, pero gracias a qué reaccionó rápido, dió un paso hacia atrás, casi se cae pero logro mantener el equilibrio.

Alzo sus manos.

-Hey hey tranquila- hablo rápidamente, no queria que le terminará matando por una confusión o algo así -Soy yo, Richie.

Le miro con cierto desprecio, seguía molesta con el por su incompetencia, por lo inútil que había sido por no llevar a cabo su tarea como era debido, pero ella también había sido una tonta al ignorar sus advertencias los anteriores días. Se había prometido que mataría aquel que estuviera frente a su puerta, pero al tratarse de Kirsch, tuvo que hacer una excepción.

Suspiró, bajó el cuchillo y abrió más la puerta.

-Pasa.

Le dejo pasar fácilmente porque además de que eran "amigos", el mayor no venía en compañía de Samantha, así que por ende todo el perímetro era seguro.
El de barba tardo en entrar a la casa, miraba embobado cada esquina del lugar, ¿Cómo no hacerlo? Si gracias al ex dueño de la propiedad y su "amigo" existía la saga de terror que tanto amaba, era un sueño hecho realidad.

-Es mucho más grande en persona.

Parecía un niño pequeño, vaya que si era un friki, tanto que ahora mismo Freeman se estaba preguntando cómo es que llegaron a ser amigos, oh cierto, porque ella también era una friki de Stab.
Cerró la puerta a sus espaldas, y puso el cuchillo a su costado, mientras ponía su mano sobre la espalda del adulto.

-Que bueno que llegas, necesito tu ayuda.

El chico se giró para estar así frente a frente a la chica con la que por tantos meses ha hablado. Tomó la mano de la pelinegra con ambas manos, acercandolas a él.

-¿Acaso es sobre el plan?- le sonrió, para después besar la palma de Amber, se habían coqueteado por mucho tiempo, y digamos que eso le había nublado un poco la vista, distrayendole de su objetivo principal.

La jóven no reaccionó ante tal acción, se mantenía sería, estaría mintiendo si decía que no entendía el porque de estas acciones, pero lo sabía a la perfección.
Suspiró una vez más, se liberó del agarré del mayor, dejandolo confundido, y si eso no fuera suficiente camino a lado de el ignorando su pregunta.

-Mi problema se encuentra en el sótano- hablo en un tono frío mientras que abría una vez más el sótano de su casa.

Al parecer tal frialdad, le había devuelto a la realidad, sacudió su cabeza para posteriormente mirar a su amiga.

-Espera un momento, tengo muchas preguntas que hacerte- hablo mientras se acercaba la dueña de la casa.

-Tu entra, responderé tus preguntas después.

Richie estuvo apunto de hablar para exigirle uns vez más respuestas en este instante, pero en cambio vio como Amber señalaba el sótano de su casa, dándole a entender que no hablaría hasta que entrara. Sin más opción, entro a aquel sitio tan tétrico gracias a su baja iluminación, seguido por atrás de Freeman.
Grande fue su sorpresa cuando al pisar el último escalón, que casi se cae de la impresión.