La noche me cautivó y me enamoré de su lado oscuro,
de los secretos que sabe guardar,
de las miles de personas cautivadas en ella,
de sus efímeras estrellas.
De los sueños que danzan en el olvido,
de su melancolía llena de felicidad
y sobre todo del romanticismo existente
más allá de la cautivadora oscuridad.
Le pido a la luna que me hablame en prosa,
que calme mi ansiedad
y que me haga volver a florecer.
Quiero ver su luz como un enorme faro,
para no perderme en la dura tempestad
y morir en la soledad.
Le pido a la oscura noche,
que no me mate,
y que no me deje perderme en mi misma.
No quiero que la oscuridad se apodere de mis entrañas.
Solo quiero apreciar las pequeñas cosas hasta sanar
y curar mi alma para olvidar mis lágrimas.
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Reflexiones de una adolescente
PoetryHoy día no es nada fácil ser adolescente, es una etapa de transformación y cambio, de querer experimentar. Por fin eres el adulto que anhelabas tanto dede pequeño, pero a la vez te das cuenta de que eso no era tan bueno e idílico como tu creías. La...
