Esa noche vosotros salvasteis mi vida, no sé cómo agradeceros eso. Ran, Rindou, gracias por aparecer esa trágica noche.
📍FICCION📍
No acepto copias o adaptaciones. Este es mi trabajo y mi esfuerzo. Quién no cumpla con lo anterior será denunciado.
A...
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Narra Rindou:
Salimos de la habitación de Riley, era obvio que algo había pasado entre ella y mi hermano. Tengo que saberlo.
Entramos en nuestra habitación, me senté en la cama y miré seriamente a Ran.
— ¿Estás bien? —me preguntó.
— Perfectamente —respondí—, pero tu estás mejor, ¿no es así?
Este se quedó callado y luego soltó una pequeña risa haciendo que me confundiera.
— Me he besado con Riley —soltó mi hermano tomándome por sorpresa.
— ¿Enserio? —asintió. No me esperaba eso, para nada.
— Estábamos hablando y nos quedamos mirando nos empezamos a acercar y nos besamos. Luego llamaste a la puerta y nos separamos.
Lo miraba sorprendido. ¿Se acaban de besar? Mi hermano y le chica que me gusta se acaban de besar.
— Entonces te ha gustado, esa sonrisa me lo confirma.
Mi hermano sonrió mientras asentía. A mi hermano le gustaba Riley y eso lo sabía, al igual que el sabe que me gusta ella.
—Mañana hablamos con ella de nuestros sentimientos, no podemos seguir así. Esto me está matando, tenerla cerca y a la vez tan lejos —comentó Ran acariciando mi hombro y sentándose a mi lado.
— Mañana será otro día. Hasta mañana, hermano.
— Hasta mañana Rin.
Ambos nos acostamos en la cama, nos tapamos con las sábanas. Esperando conciliar el sueño, el cual apareció pronto. Dejándome completamente dormido en menos de cinco minutos.
Desperté y miré a mi costado. Ran se había levantado ya que no estaba a mi lado. Me levanté y caminé hasta la cocina, en ella se podía ver a Riley haciendo el desayuno. Sonreí al verla.
— ¿Qué tal has dormido?
Ella se giro y al verme sonrió. Volvió a poner la vista en lo que estaba haciendo y comenzó a hablar.
— Estupendamente, aunque al principio me costó dormir.
— Me alegra, ¿sabes donde está Ran?
— Salió a comprar algunas cosas que le mandé. No tenemos huevos, leche entre otras cosas.
— ¿Qué estás cocinando?
— Un bizcocho, he gastado lo que quedaba.
Me acerque a ella y la envolví en mis brazos, ella se puso tensa pero, siguió cocinando. La ayude un poco a remover los ingredientes mientras ella preparaba el horno. Lo metió y esperamos a que estuviera listo.
