Tenías que ser tú - Camren

Capítulo 5

"¿Quieres más vino?" Taylor se acercó a Camila con la botella y antes de que respondiera la rellenó.

"Gracias, Tay."

"¿Cómo llevas lo de Lauren?" Se sentó al lado de Camila y Squid aprovechó para subirse a sus piernas para ser acariciado.

"¿Tengo otra opción que aceptarlo?" Sonrió dándole un trago a su copa.

"En realidad, no." Camila cerró sus ojos apoyando su cabeza del sofá.

"No sé por qué no me deja en paz, disfruta verme frustrada." Taylor sonrió.

"Lauren está loquita por ti, Camila." Camila abrió sus ojos con impresión.

"Claro que no." Taylor asintió.

"Te come con la mirada, ¿no te diste cuenta esta mañana?" Recordaba muy bien el encuentro de la mañana, y cómo la había observado de arriba hasta abajo. Interesante.

"Tiene una manera muy extraña de demostrarlo." Taylor rio fuerte.

"Es por la naturaleza de su relación, si trabajases en otro departamento te aseguro que ya hubiese intentado algo contigo." Camila mordió su labio inferior.

"Pero igual no me gustan las mujeres." Taylor levantó una ceja.

"¿Ah no?" Camila negó. "¿Cuándo fue la última vez que tuviste sexo, Camila?" Rascó su cabeza porque ni ella misma recordaba.

"¿Un año tal vez?" Taylor sonrió.

"Y ni siquiera te interesa tener sexo con un hombre, es como si no existieran para ti. Además, todos tus crushes son con mujeres. El otro día casi salivas por Catherine Zeta-Jones, no podías parar de decir lo hermosa que te la encontrabas." Camila se encogió de hombros.

"Es hermosa." Taylor sonrió.

"Lo es, y Antonio Banderas también. Solo digo que quizá deberías probar con una mujer." Taylor la observó con una sonrisa en sus labios, mientras que Camila sólo sintió todo el cuerpo tensarse.

"Okay, podría intentarlo, pero igual Lauren no es una opción." Taylor rellenó el contenido de su copa.

"No puedes negar que se ve muy bien, sobretodo cuando se viste con esos pantalones altos y tacones, todas sus curvas salen a relucir. Y esos ojos..." Hizo una pausa intentando hacer énfasis en lo que decía. "Depredadores." Susurró y Camila solo sonrió.

"¿No será que te gusta a ti?" Taylor negó.

"Por la que esta loca es por ti." Extendió su mano tocando la nariz de Camila con su dedo.

"¿Y eso que tiene que ver conmigo?" Taylor sonrió con picardía.

"Que podrías aprovecharte de esa debilidad." Camila vació su copa.

"No me interesa, solo verle la cara me da rabia, ¿te imaginas acostándome con ella?" Movió su cabeza en negación arrugando su cara en señal de asco. "Ay no, que horrible."

"La verdad que no entiendes nada de la vida." Taylor negó sin poder creerlo. "Vamos a hacer un pequeño juego mental, intenta convertir en tu cabeza toda esa rabia que Lauren te hace sentir en pasión." Camila tragó fuerte cuando una imagen de Lauren pegándola de la pared y besándole hasta el alma llegó a su cabeza. Movió sus brazos intentando borrarla.

"Ya basta, no pongas imágenes en mi cabeza." Taylor volvió a sonreír saboreando el vino. "Ni siquiera tengo idea de como darle placer a una mujer."

"Camila, es lo mismo, pero con dedos." Camila abrió sus ojos y observó a su amiga con detenimiento, Taylor se encogió de hombros. "¿Qué?, he probado muchas cosas." Camila sonrió negando, su amiga nunca dejaría de impresionarla. "Además, eres mujer, sabes muy bien lo que te gusta, solo comienza por ahí."