𝐔𝐧𝐢𝐨𝐧

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-¿Te gusta?- El de orbes lavandas preguntó clavando sus pupilas en las de la pelinegra.
-Me encanta...- Dijo ella observando el juego de joyería que Ran le regaló.
-Se que no es tan increíble pero, realmente no sabía que darte... quiero que sea algo más significativo que cualquier cosa ¿entiendes?-
-Claro que si Ran y esto es realmente hermoso- dijo mientras el le colocaba un brazalete. En ese momento la chica no pudo evitar pensar en la forma en la que debió llegar ese dinero para que Ran pudiese comprarle algo así.
-¿Pasa algo? Si no te queda podemos cambiarlo-El mayor se detuvo y la miro sutilmente a los ojos.
-No, no es eso. Es perfecta Ran- La chica se dirigió a sus labios y plasmó un suave beso como agradecimiento, después de todo no importa la forma en la que lo consiguió, ella se ha relacionado con este tipo de gente desde que es una niña.
Pero aún así conservada su pureza, ella no sería capaz de ser uno de ellos.
-Que bueno porqué se te ve realmente bien- Sujetó la mano de la chica y agacho su cabeza para besarla con delicadeza. -Saori, se lo mucho que esto puede agobiarte y cuanto te preocupas por mi trabajo, valoro demasiado todo lo que has hecho por mi y no creo poder esperar más. Se que nuestro futuro es impredecible y podría ser peligroso pero me gustaría pasarlo contigo, me gustaría ser tu novio.- El joven soltó y mantuvo el aliento esperando la respuesta de la fémina.
-Ran yo...-Ella no se esperaba aquella declaración y propuesta en ese momento por lo que las letras en su garganta se estaban enredando. Ella sabía perfectamente lo que quería ¿por qué le estaba costando? Era como si una fuerza intentara retenerla.
Ran la miro desanimado, tal vez se aceleró demasiado, tal vez a ella no le gusta de la misma forma.
-S-Si, quiero que seamos novios- Por la mente de la chica pasó su primera experiencia amorosa, y rió al darse cuenta de que sonaba igual de inexperta que en ese tiempo.
El más alto liberó un suspiro al viento y no
espero mas para dejar que aquel imán entre ambas bocas de uniera.

El más alto liberó un suspiro al viento y noespero mas para dejar que aquel imán entre ambas bocas de uniera

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Se encontraban en las sillas de un restaurante en la costa de la playa.
Habían preparado en viaje para ellos mismos, aprovechando un descanso.
Estaba algo vacío ya que no mucha gente iba ahí, o solo iba gente que tenía interacciones directas o indirectas con la Bonten.
-Ven, esta oscureciendo- Ran se paró y comenzó a caminar hacia la entrada de su cuarto del hotel.
Su cuarto era tal como una casa pequeña, incluso tenía su propia alberca, cocina, baños, sala y camas.
La chica lo siguió mientras lo tomaba de la mano, estaba realmente emocionada y por parte del contrario pasaba exactamente igual.
Cuando llegaron pasaron un rato juntos y decidieron meterse a la alberca, estaban teniendo un viaje de algunos días y se sentí realmente bien.

Saori's pov:
Estoy nerviosa.
No se que hacer honestamente. Es mi primera relación "real" después de 8 años, se siente extraño pero al mismo tiempo me siento muy contenta y llena.
Para entrar al la piscina retiro el pareo de mis caderas y por alguna razón siento mi cuerpo hervir y un poco de pena.
Ran nota esto y forma una media sonrisa.
-¿Por que te da pena? Literalmente no hay nada ahí que no haya visto antes- Dijo Ran desde la alberca.
Habíamos tenido sexo algunas 4 veces pero casi siempre era bajo las cobijas o en lugares oscuros, en cambio ahora todo su cuerpo y el mío estaban iluminados por las luces y por la luna.
Me metí a la piscina con su ayuda. El agua está más que tibia, la vibración provoca que burbujee y el vapor cubre todos los extremos.
-No tengo pena- Dije levantando mi mirada, y en realidad tenía un poco pero sabía que el no me juzgaría.
-¿Ah, en serio?- Mostró una sonrisa de oreja a oreja.
-Si- Dije cuando sentí sus manos en mi cintura.
Ran se recargo en una pared de la alberca y se encargó de colocarme de espaldas frente a él.
-Mmm, que bueno linda- bajo su cuello hasta el hueco entre mis hombros y mi cuello y recargo su cabeza ahí.

Stargirl|Ran Haitani Donde viven las historias. Descúbrelo ahora