Capítulo 5: El motivo

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-"Esperen"-

El grupo cambió su vista para notar a Bakugou de pie hacia ellos, apuntando el cuchillo de caza directamente a Ochako -"Sólo dile la misma cantidad de información que sabe el enemigo"-

Ella gimió internamente. Al parecer, ella tampoco pudo evitarlo, porque él la fulminó con la mirada. Todoroki entrecerró los ojos, pero levantó la mano en un gesto pacífico -"Muy bien. Lo siento, mi amiga"- le sostuvo la mirada con una mueca compungida.

Ella soltó una risita poco convincente y se rascó la nuca -"No te preocupes, nunca se es demasiado precavido"-

Comprendía la paranoia. Por lo que sabían, Ochako podía ser un micrófono para reunir información valiosa que el enemigo pudiera extraer más tarde. No quería estar de acuerdo, pero no podía descartar la posibilidad de que el enemigo, Endeavor, hubiera cambiado a su sanadora Ochako por otra menos útil. La banda dorada en su estómago podía ser cualquier cosa, desde un símbolo utilizado para unirla al hechicero hasta un simple efecto secundario del hechizo. El estómago se le hizo el doble de grande.

Para consolarse, juntó las yemas de los dedos para unir las almohadillas. ¿Hacía esto la otra Ochako? -"Antes de que hablemos de por qué estamos aquí, ¿podrías contarme algo más sobre quién soy?"-

Todos se estremecieron. Nada de lo que decía estaba bien. Todoroki tenía una expresión de dolor en el rostro, mientras que Iida le dedicó una sonrisa triste -"Siempre has sido un misterio, Uraraka"- Enderezó los hombros.

-"Mientras crecía, aparte del príncipe y sus hermanos, rara vez había otros niños en el castillo. Como el príncipe y yo tenemos una edad parecida, nos educaron juntos. Era natural que, cuando cumplí trece años, asumiera oficialmente el cargo de vasallo. Esencialmente, le he estado protegiendo desde la infancia. Supongo que sería útil recordarte que mi familia ha servido como guardia especial de la familia real de Ember durante generaciones. Desde que nací, he estado destinada a ser caballero y servir junto a mi familia"- No pudo evitar captar el matiz de amargura con el que lo dijo.

-"En fin... Una mañana -tendríamos entonces ocho o nueve años- las caravanas comerciales hicieron su viaje anual a Aberon, la capital, nuestro hogar. Sucedía cada primavera como una forma de que los mercaderes ambulantes vendieran mercancías de mayor calidad mientras pagaban su impuesto anual a la corona. Tras un carro iba una niña muy sucia y con la mirada perdida. Eras... bueno, eras tú"-

-"Parecía que ibas sin compañía, como si sólo siguieras a este mercader porque no sabías adónde más ir"- Iida se miró las manos y a Ochako se le encogió el corazón -"Recordé que me entristecía"-

Ochako no era la única profundamente implicada en su historia. Incluso Bakugou, fingiendo desinterés, tenía su oído en su dirección. Kirishima tenía las piernas recogidas contra él, escuchando atentamente con la barbilla apoyada en las rodillas. Iida continuó -"Naturalmente, el príncipe Todoroki y yo vimos a otro niño entrar en los terrenos del castillo e inmediatamente nos emocionamos. No importaba que el príncipe tuviera prohibido salir de sus aposentos en ese momento, nada iba a impedir que conociéramos a un posible compañero de juegos."- Sonrió -"El mercader al que seguían les había ordenado ir a buscar agua al pozo público. Mientras preparaban sus caravanas, entraste en el patio con un cubo de casi la mitad de tu tamaño"-

El joven soltó una carcajada genuina que levantó el ánimo de Ochako -"Fue perfecto. El patio estaba justo dentro del recinto del castillo, así que pude colarte al príncipe. Te asustaste mucho. No te culpo, después de un viaje tan arduo de repente te abordaron dos chicos hiperactivos"-

Ella sonrió ante el pensamiento -"¿Y cómo acabé quedándome en la capital?"-

Iida miró a Todoroki, que carraspeó incómodo -"Yo... tenía una herida grave en aquel momento"-Sus ojos se desviaron hacia el lado derecho de su cara -"Me recluyeron en mis aposentos para que pudiera curarme bien. Cuando nos conocimos, le echaste un vistazo a mi vendaje y me preguntaste si podías verlo. No sé qué me llevó a quitármelo, pero lo hice"-

Viendo dobleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora