Cap. 5.2 - Curva "Quiero protegerte"

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Llega a casa cuando ya todos estaban dormidos

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Llega a casa cuando ya todos estaban dormidos.

Se entretuvo toda la tarde hablando con Tanjiro, al final acordaron en verse dentro de dos semanas en la finca mariposa.

Para su suerte, Tanjiro no sacó de nuevo el tema de las feromonas o de la esencia demoniaca, tampoco pregunto sobre por qué Akaza se quedaría en la finca de su familia durante todo el tiempo que requiera para su total recuperación.

Hoy fue un día lleno de altibajos, no tiene energías para hacer otra cosa que no sea ir a dormir.

Pero todos sabemos que eso no sucederá.

En lugar de ir a su habitación, Kyojuro toma su katana y sale de la finca. Hoy la noche está despejada, la tormenta del día anterior quedo en el pasado y ahora el cielo nocturno reluce en todo su esplendor.

No sabe a dónde se dirige, sin embargo, conoce muy bien a su presa.

El primer demonio estaba tan distraído mientras se desplazaba por los enormes arboles de la zona, cuando de repente su cabeza se separó de su cuerpo. 

Fuego y navajas, es lo que reflejan los ojos del Hashira.

Se había estado conteniendo durante todo el día, solo para este momento. El filo de la katana de Kyojuro bañada en sangre demoniaca con cada asesinato. 

Apenas sentía la presencia de los demonios, se abalanzaba contra ellos con toda su furia.

Disfruto romper sus huesos, recordando cada marca en el cuerpo de Akaza.

El solo pensamiento lo hace perder el control de su fuerza, rompiendo todos los dientes frontales de un demonio de una patada. Gruño furioso cuando vio los colmillos salir de la boca del demonio.

"¿Él lo marcó?"

Está furia lo está volviendo loco.

La sangre salpica manchando sus pestañas.

No es suficiente.

Jamás será suficiente.

En un momento olvida que tiene una espada y comienza a lanzar golpes, cada uno dirigido a la mandíbula. Siente un tipo de satisfacción al ver los dientes blancos romperse bajo sus puños.

La adrenalina corre por su cuerpo, los torrentes sanguíneos se llenan de ella dándole más fuerza. Grita contra la cara de su presa mientras la sostiene del cuello antes de romperlo.

En medio de la oscuridad del bosque, se escucha un rugido.

En medio de la oscuridad del bosque, se escucha un rugido

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