¡¡Mira Laura!!

Capítulo 27

Hoy estoy súper nerviosa de hecho no me he podido concentrar mucho en el estudio pero por suerte ya voy casi acabando me falta muy poco para poder enseñárselo a mi jefe completo y espero que le guste porque odio tener que rehacer algo. En cuanto he llegado al apartamento ya Cloe estaba allí, he picoteado algo rápido y me he ido directa a la ducha.

¿A qué se debe tantas prisas compi?- Pregunta Cloe tan relajada como siempre.

¿Te acuerdas del chico que te comenté el otro día cuando salíamos del Gym?

Sí, ¿Qué pasa?

Pues hoy voy a conocer a sus padres es por eso que estoy tan nerviosa

¿Ya? ¿Tan rápido?- Pregunta mi compañera sorprendida.

Sí, lo mismo pensé yo en un principio, la verdad que es un poco precipitado pero así lo hemos decidida.

Bueno, seguro que te va muy bien, no te preocupes.

En ese momento recibo un mensaje de Alex: Holaa, se me olvidó decirte que el encuentro será en mi casa y ya luego iremos a tomar algo 😘

Mierda, no había pensado en que tal vez salíamos pero ya no me da tiempo a cambiarme así cojo mi bolso y a punto de salir oigo a Cloe ¡¡Muchísima suerte!! a veces ella me recuerda a María porque ambas son muy positivas.

Cuando llego me recibe Alex, ¿Cómo está la chica más guapa?

Bien mi rey, ¿Y tú?

¿Rey? ¿Se te ha ocurrido ahora?

Lo miro con mala cara y él como siempre no para de reírse, bueno debo de admitir que me encanta.

Cuando entro veo que ya sus padres están allí. Buenas tardes- Digo un poco tensa, Buenas tardes- Ambos me reciben con dos besos.

Hola Laura soy Manuela y mi marido Antonio- Encantada de conoceros por lo que veo ya sabéis mi nombre.

Sí, Alex nos ha hablado de ti y desde entonces teníamos muchas ganas de conocerte, también nos ha contado lo de tu madre que sepas que lo sentimos mucho, ninguna chica se merece eso bueno ¿En qué trabajas?

Manuela, estás agobiando a la chica, déjala respirar un poco, acaba de llegar- Verdad mamá no empieces con tus interrogatorios de siempre.

No pasa nada, no me molesta en absoluto. Pues señora yo antes trabajaba en Barcelona como administrativa y ahora soy técnico de ventas en una empresa de aquí.

Oh, entonces te ha pasado algo parecido que a Alex, por cierto no me trate de usted eso solo me hace sentirme más vieja- Dice la mujer con una sonrisa.

Bueno, ¿Y  tu padre cómo se encuentra? ¿A qué se dedica?- Pregunta Antonio.

Mi padre era escalador profesional al igual que mi madre pero por lo que le pasó a ella abandonó esa pasión, luego empezó a trabajar en una cooperativa pero tuvo un accidente con una de las máquinas y se le fastidió la pierna con lo cual ya no puede trabajar y su nueva afición es la carpintería, le encanta hacer cosas de madera, ahora está haciendo una casa para pájaros.

Oh, interesante veo que ha tenido mala suerte primero lo de su esposa y luego lo de la accidente laboral, me hubiera gustado conocerlo hoy se ve un hombre interesante.

Sí, el siempre ha sido un buen padre y un gran apoyo para mí después de lo de mi madre.

Me imagino- Responde el hombre.

de camino al bar, Alex aprovechando de que sus padres van delante de nosotros y me da la mano, he tenido el mismo escalofrío que cuando lo hizo en la fiesta pero se puede decir que ya me voy acostumbrando un poco.

Laura, quiero saber más sobre tus gustos- Dime más cosas que todavía sé poco sobre ti.

Pues mira me encantan las rosas y también el color rojo, como pudiste observar ayer me encantan las películas de comedia y la pasta.

Así que las rosas eh- Me mira con una sonrisa de lado.

Sí, las rosas, ¿Qué tiene de malo señorito?

Nada, pero no me esperaba que a una chica tan poco romántica le pudieran gustar las flores que simbolizan el amor. Eres una caja de sorpresas- Me sonrojo y le aprieto más la mano.

Ya nos hemos tomado un refresco y sus padres se tenían que ir, después de una agradable despedida nosotros hemos decidido que nos quedaremos un rato más en el bar.

¿Y bien? ¿Qué te han parecido mis padres?

Para mi sorpresa ambos son bastante simpáticos, me esperaba que fueran más serios.

Creo que alguien ve demasiadas películas eh- Otra vez esa sonrisa de pícaro que me encanta.

Oye, que insinúas- Le pregunto con el ceño fruncido, en ese momento me acerco a su oído y le susurro: Me encanta esa sonrisa tan pícara que tienes.

Y a mí que me gusta que te guste, ¿Damos una vuelta?

Unos minutos más tarde, estamos por un parque que por cierto es precioso a pesar de que ya haya anochecido.

¡¡Mira Laura!!- Escucho decir a Alex.

Hay un montón de rosas allí- Dice ilusionado, de un momento a otro veo como sale corriendo y vuelve con un ramito y dos rosas aparte.

Esto es para mi chica preferida- Me entrega el ramo y me coloca otra en el pelo y acto seguido él se coloca una en la oreja.

¿Estoy guapo?- Pregunta mirándome atentamente.

Para mí siempre lo estás- Le respondo.

Veo que los dos estamos demasiado cerca así que la luna ha sido testigo del beso tan dulce que se ha producido a la luz que ésta nos ofrece.