Capítulo 29

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Acabo de llegar a Barcelona agotada y ahora tengo que pedir un taxi hasta la casa de María porque aquí todo está tan lejos que es muy complicado llegar a algún sitio caminando.

Al llegar María me abre la puerta y me doy cuenta que tiene muy mala cara, tiene pinta de que no ha dormido en toda la noche ya que las arrugas se le marcan demasiado.

Hola Laura, venga pasa no te quedes ahí parada- Dice ella al ver que me quedo sorprendida al verla.

El reencuentro no ha sido para nada como me lo esperaba porque incluso cuando vivía aquí e íbamos cada una a casa de la otra parecía que no nos habíamos visto más que nada porque ella se entusiasmaba mucho a pesar de que quedábamos a menudo pero sin embargo ahora no parece la misma, parece que en vez de que he llegara yo ha llegado un vecino cualquiera.

Entro en su casa y veo que está tal cual la recordaba cada rincón con su única esencia que lo caracteriza. Estoy observando la casa atentamente hasta que me doy cuenta que James no está y de repente María se abraza a mí y empieza a llorar como si se le fuera la vida en ello. No puedo verla así, es mi mejor amiga desde la infancia y verla en estas condiciones me destroza.

María entiendo que todo esto no tiene que ser fácil, pero dime quien lo ha decidido solo eso porque sé que ahora no estás para contarme muchos detalles.

No pasa nada, te lo contaré porque por teléfono solo te conté por encima lo último que quería es que te preocuparas por mí. Ven, vamos a sentarnos, prométeme que diga lo que te diga no te vas a enfadar con James porque recuerda que esto es un tema de pareja con lo cual no significa que James sea igual con los demás y aunque te quieras enfadar con él pero no le vayas a decir nada porque sé que aunque lo hagas por mí eso solo empeoraría las cosas. Verás Laura, como ya te conté desde hace un tiempo él actuaba bastante raro cuando estaba conmigo decía que no pasábamos tiempo juntos, que yo estaba siempre trabajando y eso era lo único que me preocupaba. Hablé con él sobre eso, le comenté lo de las vacaciones si después de eso la relación seguía igual pues ya veríamos que hacer, al comentárselo parecía convencido así que yo me quedé más tranquila pero conforme pasaban los días se comportaba peor, un día cuando estábamos discutiendo tiro todos los cuadros, todos los papeles con los que él mismo estaba trabajando en ese momento y encima fue a mí la que me tocó recoger todo el desastre seguido de insultos. En este tiempo mi vida se ha vuelto un infierno pero no te pierdas la bomba de todo esto.

Yo asentía con los ojos entreabiertos, no me podía creer como este hombre era así, parecía tan bueno cuando estaban juntos.

Lo peor de este asunto es que, cuando llegué del trabajo agotada me lo encontré con otra en la cama, en nuestra cama ¿Te lo puedes creer? Así que después de eso sin pensármelo le pedí el divorcio. Todavía no puedo creerme como he podido estar este tiempo con una persona así yo pensaba que lo conocía y al final resulta que he vivido con una persona que no es como decía ser, admito que yo no soy perfecta pero yo lo quiero y jamás hubiera sido capaz de hacer algo así, de hecho no sé si estoy más decepcionada con él o conmigo misma ¿Cómo he podido dejar que me engañara de esta manera?

Mary, tú no tienes la culpa de nada, a pesar de sus quejas has intentado arreglado para que estuvierais bien y él es el que no ha querido poner de su parte porque al final como tú sospechabas había otra persona detrás pero no te mereces todo esto, así que si quieres aunque sé que ahora mismo estás bastante dolida pero iremos a firmar la demanda de divorcio. Pienso que será lo mejor para vosotros dos y yo te acompañaré para que sepas que lo único que quiero es apoyarte ahora y siempre, tanto para lo bueno para lo malo porque desde el primer momento aunque sé que tú no has sido consciente me has enseñado el verdadero valor de la amistad porque, en los momentos buenos todos están pero en los malos es al contario, la mayoría lo único que saben es dar la espalda pero tú has sido diferente y sé que no cambiarás.

Muchas gracias Lau, de verdad no sabía la falta que me hacía un momento así, de momento eres la única que me puedes curar con tus palabras. Te lo agradezco un montón porque estando sola en casa iba a hacer que me volviese loca dándole vueltas a todo este tema.

Sabes que no me lo tienes que agradecer, como suelo decir las gracias son para los desconocidos pero nosotras ya tenemos la confianza suficiente.

¡¡Mira Laura!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora