My girl [One-Shots Eddie Munson y Joseph Quinn]

"No, please." +18

Advertencia: Masturbacion publica (masculina & femenina), insultos, regaños, suspiros.

Autor: Katsumiis

︻デ═一

Tomaste asiento con tranquilidad al lado de tu novio, quien no había parado de admirarte toda la mañana, estaba completamente embobado con tu rostro, sonrisa, mirada, cabello, cuerpo, risa, tu voz, cada minúsculo detalle para el era una obra de arte.

— Joder, no entiendo como haces para verte en hermosa. — Dijo con una sonrisa mientras te miraba embobado con una gran sonrisa en el rostro. Te reíste nerviosa y con un leve sonrojo en tu rostro mientras tomabas asiento.

— Basta, ¿si? — Le dijiste con suavidad a lo cual el rió, enternecido. Coloco su mano en tu muslo y dio un apretón mientras te sonreía y apoyaba su rostro en una de sus manos.

— Eres muy preciosa en falda, amor... — Te susurro con picardía mientras metia su mano debajo de tu falda y fue cuando comprendiste, comprendiste su comportamiento durante toda la mañana y la razón por lo que lo hacia. Cuando usabas faldas era cuando el no podía controlarse, eras irresistible a sus ojos. Babeaba cuando te miraba en las mini faldas que usabas que combinaban, casualmente, con tus bragas y ropa.

— Eddie, aqui no. — Le dijiste aun más nerviosa al sentir como sus dedos rozaban la fina y suave tela de tus bragas. 

— Amor, de verdad, eres una diosa hermosa. — Dijo con una sonrisa, apartando tus bragas un poco. Le ibas a recordar que estaban en publico cuando el sonido de la puerta te distrajo.

— Buenos días, chicos, perdonen la tardanza. — Se disculpo el profesor caminando al escritorio, dejando sus cosas en dicho lugar, y observando el lugar, posando la mirada en ti y en Eddie. — Vaya sorpresa joven Munson, puntual un día lunes por la mañana. — Dijo sorprendido y algo alegre el maestro.

— ¿Que puedo decir? A veces es bueno cambiar la rutina. — Bromeo con una sonrisa. El profesor rio suavemente antes de empezar a dar su clase. Los dedos fríos de tu novio no paraban de darle atención a tu clitoris mientras sacabas tu libro y un suspiro con fuerza salio de tus labios.

— Eddie, estamos en clase... — Le susurraste pero el se hizo el que no te oyó, abriendo su libro. — Eddie... — Gemiste por lo bajo mientras tomabas su brazo con fuerza, sintiendo como empezaba a tocar tu entrada.

— ¿Si? — Se hizo el inocente mientras sonreía. Lo miraste suplicante pero el ignoro tu mirada a lo cual decidiste actuar. Una mano se coloco en su pelvis, dando suaves masajes contra sus dos testículos. — Joder... ¿Con que quieres que sea así, eh? — Pregunto en un suspiro placentero. No respondiste, estabas concentrada en los masajes que dabas y resabias. Luego de unos segundos, su erección ya era presente y lo miraste con una sonrisa, sintiendo como metia un poco sus dedos y de un segundo para otro, su erección dura ya estaba entre tus dedos.

Un suspiro salio de ambos al sentir la calidez del otro, excitados. No podías creer que estabas haciendo eso en plena clase a primera hora pero tampoco te quejabas, amabas la atención que te daba tu novio.

— Señorita T/N, ¿se encuentra bien? — Pregunto el profesor al ver tu rostro enrojecido.

— Si, solo siento algo de calor. — Dijiste con una suave sonrisa, sintiendo como el mete dos de sus dedos en ti, haciendo que abras más tus piernas y ahogues un gemido mordiendo el labio.

— ¿Sientes mucha calor, cariño? — Pregunto en un susurro mientras tomaba la mano que tenias en su polla, haciendo que el empiece a moverla bruscamente, al igual que sus dos dedos. Un suave gemido salio de ti y por suerte, nadie te oyó.

— Maldito... — Gemiste por lo bajo, volteandolo a ver. — Vete al carajo... —Le dijiste mientras revolvías tu cabello con tu mano, excitada y completamente descontrolable. Se follaban con brusquedad, buscando que alguno ganara la dominación para cuando hagan la verdadera acción en un lugar más privado.

— Abre más las piernas. — Ordeno el a lo cual lo hiciste, inclinándote un poco para atrás para que pudiera moverse mejor. Te retorciste disimuladamente mientras observabas lloriquear su dura polla entre tus dedos, sonriendo para ti misma al lograr esa reacción.

— ¿Te imaginas que en vez de mi mano sea otra cosa? — Le preguntaste con el objetivo de hacer que su polla lloriqueara más al recordase lo que paso unas noches atrás.

— Joder. — Gimió por lo bajo antes de verte. — Eres mi debilidad, te lo juro... — Susurro mientras baja un poco su mirada a tus pechos. — Y esas cosas me matan. — Dijo a lo cual reiste suavemente.

— Munson, T/A (tu apellido).— Llamo el profesor a lo cual ambos lo voltearon a ver. — Si siguen hablando los voy a separar. — Advirtió a lo cual ambos asintieron. Cuando se dio la vuelta, sentiste como metio sus dedos profundo haciendo que te liberaras sin previo aviso, retorciendote y mordiendo tu labio.

— Gane. — Anuncio el, observando como disfrutas de tu orgasmo en silencio. Lo miraste con desprecio antes de observar su polla, cual aun lloriqueaba pero no se corría. — ¿Que? ¿Quieres meterlo en tu boquita? — Pregunto a lo cual asentiste, sin parar de mover tu mano. — En otra ocasión, ¿si? — Asentiste nuevamente, moviendo tu mano con aun más fuera antes de observar como empezaba a correrse con intensidad. Toda su corrida la detuviste en la palma de tu mano, sintiendo su calidez y observando como el disfruta de su orgasmo. Al sacar los dedos de ti, luego de un rato, soltaste un suspiro a lo cual el profesor se giro a verte.

— Señorita T/A, ¿quiere pasar? — Pregunto con un tono serio. Rápidamente negaste y le sonreíste. — Silencio. — Ordeno y volviste a asentir antes de mirar su mano y luego a tu novio. Lo miraste con una dulce sonrisa antes de lamer tu palma.

— Delicioso.— Le susurraste a lo cual el se mordió el labio, sonriente.

— Preciosa. — Te dio un suave beso en la mejilla antes de acomodarse en su asiento y empezar a "prestar" atención.