Bostezando estiro todo su largo y negro cuerpo felino.
Levantando la cabeza busco el sonido que lo había devuelto al reino de los vivos.
Los ligeros golpes en la puerta se repitieron, sin esperar respuesta esta se abrió, dando paso a Seoju, la mujer hermosa de cabello negro.
—Veo que ya se despertó— comento la mujer con una sonrisa que Soo no supo interpretar — La cena está servida
en el comedor— con esas palabras dio la vuelta y salió dejando a una boquiabierta pantera.Soo descubrió que sí, definitivamente estaba odiando a esa mujer.
Con una sonrisa malicioso se imagino, entrando en la noche al cuarto de esa
estirada, y con una tijera cortarle de un tajo esa larga y lustrosa cabellera negra.Regresando a su forma humana tomo la única ropa que tenía, la que había traído puesta de su casa, y entro con ella al
baño.El lugar constaba de una ducha en la que apenas cabía una persona, el inodoro y un lavado, todo acomodado casi a la fuerza.
Definitivamente el cuarto que le habían dado no fue construido para ser una habitación y el baño era muestra de
eso; Soo bufo su enfado, al menos no lo habían enviado a dormir a la bodega de las escobas.Bajo el agua caliente trato de lavar todo el coraje que le estaba provocando la situación.
Su supuesta pareja, ya que era algo que no aceptaba del todo, era un tipo demasiado bien parecido, demasiado engreído y demasiado hijo de puta, en eso podía resumir todas las cosas con respecto a él.
Cuidando de no mojarse el pelo se enjabono y luego se aclaro bajo el agua. Tomando la toalla se fricciono la piel color chocolate claro con tanta fuerza que se comenzó a poner de un suave tono carmín.
La idea de salir de la habitación y clavarle los colmillos al alfa era algo que le parecía cada vez más tentador.
Frente al espejo se acomodo las trenzas que
evitaban que los mechones de cabello negro rizado hicieran de las suyas.Acomodándolas hacia a otras con una liga las dejo caer sobre su espalda.
Sintiendo como si las paredes lo fueran a aplastar salió del cuarto de baño con la toalla atada a la cintura, de mala gana se puso el pantalón de mezclilla azul de tela desgastada y la camiseta verde que hacía juego con sus ojos.
No es que cuando eligiera su ropa hubiera buscado algo para alegrarle la vista al hombre, nada de eso, por él podía irse al diablo.
Llegar a la conclusión de que no solo lo había acomodado en el cuarto donde el antiguo alfa instalaba a sus putas, sino que
también, bien podía ser la bodega de la limpieza, eso ya era demasiado.Al salir al pasillo noto que la casa estaba muy silenciosa.
La luz del día ya se había extinguido hacía una más de una hora, las tenues luces acomodadas de modo estratégico le daban un ambiente acogedor.
Sintiéndose como un ladrón camino hasta
llegar a la sala de entretenimientos, o así le pareció por la enorme pantalla plana y las consolas de juegos que había.La habitación era espaciosa, grandes ventanales daban del piso al techo, cortinas de telas suaves se mecían con la brisa
nocturna, los sillones eran mullidos, en la mesita de madera del centro se notaba que muchos habían subido sus pies en ella
mientras se relajaban viendo la televisión.Al observar las esquinas pudo notar los parlantes del equipo de sonido muy
bien disimulados con la decoración.Ese lugar debía ser el templo de la relajación masculina.
![](https://img.wattpad.com/cover/340414205-288-k228db3.jpg)