𝗩𝗶𝗰𝗶𝗼𝘂𝘀; 𝖱𝖾𝖺𝗅𝗂𝖽𝖺𝖽 𝖣𝖾𝗌𝖾𝖺𝖽𝖺.

9. Reputation

Reputation

Habían pasado ya dos semanas después de ese extraño acontecimiento y todo iba bastante bien. Había pasado la mayor parte de mis días en la academia de ballet torturando mis pies y también torturando a Draco. Quien por cierto ya sabia lo de el sobrenombre.

El martes después de ese caótico fin de semana Draco entro a la sala común hechando humo, yo estaba sentada en frente de la chimenea leyendo y escuchando música cuando me tomo de el brazo obligandome a levantarme y exclamó “La próxima persona que se atreva a llamarla cinco minutos le romperé la nariz” y luego me regañó por no haberle dicho antes.

Sin embargo no había ayudado mucho eso, pues aún escuchaba por los pasillos el mismo sobrenombre ridículo. Decidí ignorarlo, en algun punto iba a terminar de todas formas y no me afectaba directamente.

Bueno, no del todo.

Por los rumores había decidido no acercarme mucho a Granger, no quería que saliera afectada por todo lo que estaba pasando y menos que hicieran los mismos rumores sobre ella solo por estar conmigo. Así que no hubo desayuno ni nada por el estilo, solamente me limitaba a saludarla de vez en cuando cuando la veía por los pasillos o cuando yo estaba con Ron y ella se acercaba.

No quería pero parecía que estaba evitandola por sobre todo. Y se veía extremadamente grosero. Sabía que en algún momento tendría que explicarle pero no podía, simplemente de pensar en el hecho de que seguramente había escuchado los rumores se me revolvía el estómago. Pero fue estúpido, porque... es Granger.

Aún que no estubo de el todo mal, pues estuve gran parte de mis días conviviendo con los Slytherin y ahora sabía muchísimas cosas de ellos, son muy comunicativos entre si, por lo que no fué difícil.

Además conocí a alguien mas de el grupo. Segun Pansy es “la parte mas importante de”.

Su nombre es Kira.

Y es la perrita de Tom. Una maltes mini, blanca de lo mas presiosa. También es la adoración de Draco, Blaise, Pansy y Regulus.

Aún que para conocerla estuve en una batalla de miradas con Tom por mas de dos horas, pues en Hogwarts no se puede tener perros y vive con el miedo constante de que alguien lo delate. Al final me obligó a hacer una promesa de sangre.

Ahora tenía ahora una gran cicatriz en la palma de mi mano sinónimo que ahora era oficialmente de su grupito. Y eso se reflejaba en mi habitación, pues ahora a donde voltearas veías ropa de Pansy, equipo de quidditch de Draco, muñecos de la perrita de Tom y basura de golosinas que me robaban Regulus y Blaise.

Pero no solo estaba con los Slytherin, con Ron, Harry y los gemelos también pasaba mucho tiempo, normalmente en las tardes antes de ir a la academia iba a ver los entrenamientos de quidditch y aveces jugábamos los cinco, era bastante divertido además de que Harry y yo éramos igual de competitivos y aveces terminamos con moretones.

Asi que si. Tenia muy poco tiempo como para prestarle atención a lo que decían de mi.

Aún que aveces no me lo tomaba tan bien...

Como esa tarde que estaba almorzando sola después de clases ya que los demás tenían cosas que hacer y unos idiotas de Slytherin aprovecharon para hacer sus “burlas”.
Lastima que yo no estaba de muy buen humor como para soportarlos.

Estaba leyendo un libro de pociones cuando sentí que se sentaron dos personas a cada lado de mi y otros dos enfrente.

— ¿En cuanto tiempo creés que pueda comerme todo esto? –habló el que estaba a mi izquierda moviendo su plato de un lado a otro.