𝗩𝗶𝗰𝗶𝗼𝘂𝘀; 𝖱𝖾𝖺𝗅𝗂𝖽𝖺𝖽 𝖣𝖾𝗌𝖾𝖺𝖽𝖺.

18. Promesa silenciosa.

Promesa silenciosa.

La mañana siguiente desperté en una cama gigante con un pequeño dolor de cabeza. Después mi pequeño incidente y de llegar a la estación 9¾ habíamos tomado un translador hacía la mansión de los Malfoy la cuál estaba afortunadamente vacía pues los padres de Draco estaban en un viaje de trabajo.

Baje las elegantes escaleras con Ginger en su jaula y caminé a lo que parecía ser la cocina, se escuchaba una radio y unas cuántas voces dentro por lo que supuse que los demás ya estaban despiertos y preparando el desayuno.

Mi primera vista al entrar fué ver a Regulus con un sarten en la mano junto a Pansy y Draco quienes se veían mutuamente y Blaise riéndose del otro lado de la cocina.

— Buenos días — saludé antes de reírme por el omelette medio quemado de huevo que estaba tirado en el piso.

— Hey ¿cómo estás? — el primero en hablar fue Regulus — Planeabamos llevarte el desayuno pero estos imbéciles acaban de tirar todo.

Me reí ligeramente — Estoy bien, gracias por preocuparse.

— ¿Segura? — habló Pansy caminando hacia mi — Esa cosa era horrible.

— Si, segura — sonreí — Gracias por quitarmelo de encima de todos modos.

— Cuando sea — respondió Draco restándole importancia.

En ese momento Tom entró a la cocina con el periódico en sus manos acompañado de su pequeña perrita que corrió inmediatamente hacía mi para que la levantara en mis brazos pero al ver a Ginger; quien por cierto cada día se veía más grande, decidió pasar de largo.

— Bueno, buenas noticias para todos — dijo — Finalmente volvieron a atrapar a Barty Jr.

— ¿De verdad? — preguntó Regulus.

Resulta que el ministerio ya desesperado le había dado el caso a un cazador experto, el cual lo había atrapado en menos de una semana sin problema alguno.

»esto si que explicará mucho« pensé para mi misma viendo la foto de Ojo Loco en el periódico. Me pareció incluso graciosa la forma en la que de nuevo; el universo volvia a acomodar las cosas.

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Después de ese motivante desayuno habíamos decidido salir a patinar pues el lago estaba en el punto perfecto y considerabamos muy aburrido pasar toda la mañana encerrados en la mansión esperando el árbol de navidad. Después de deshacer todo el armario de Draco encontramos lo necesario y abandonamos la Mansión Malfoy.

Siendo totalmente sincera, no se patinar en lo mínimo. Nunca lo había visto como si fuera algo difícil por lo que pensé que aprendería rápidamente sin ningún problema. Error.

— ¡Lento, lento, así es! — decía Draco quien se había ofrecido amablemente a ayudarme a aprender.

(Me puse los patines trate de patinar y caí encima de Tom por lo que huí con Draco y me le pegue como garrapata).

Avanzabamos lentamente tratando de mantener el equilibrio con mis manos aferradas a las suyas, hasta que me soltó lentamente para que lo intentara sola cosa que evidentemente habia sido un error, pues entre en pánico cayendo; de nuevo, encima de el.

— Lo siento, se me atoró el pie — dije entre risas tratando de levantarme mientras el se tapaba la cara con sus brazos y reía.

— Está bien, ya te caes mejor — se burló haciéndome reír.