Mentiras Piadosas [Sano Manjiro y Tú]

Acto XVIII

•Dime algo que olvidaré•

Lia Zakharov

Tengo manía por repetir constantemente una canción que, por supuesto, no saco de mi cabeza desde hace ya un tiempo. Aquella composición junto con los instrumentos y mis audífonos con máximo volúmen son la mezcla perfecta en el trabajo.

No es cotidiano que este en una sesión fotográfica, en cambio, la edición de ciertos detalles digitales y la narración de los artículos para las revistas de moda son parte de mi día a día. Nunca me aburro, me encanta jugar con las palabras. Me expreso mejor en ellas.

Me senté en la silla de modo que mis piernas quedaron arriba de la misma, de manera cruzada, con el lápiz táctil me dedico a corregir errores de luz. Es una tarea muy sencilla.

Terminó y comienzo a guardar en un estante algunos de los líquidos que suelo usar para la revelación de fotos. El día anterior lo usé y olvidé guardarlos. El único problema que tengo es la altura del mueble.

Encamine mi andar a la única silla de la habitación, justamente al intentar subir pude sentir una mano tomarme de los hombros. Pegué un brinco por el susto.

-Discúlpame, Lia -Mitsuya rió nervioso, y aunque no pude escucharlo, sus gestos y labios son fáciles de leer. Me quitó los audífonos y negué.

-Está bien, trataré de mantener la música en un volumen bajo -contesté-, ¿Necesitas algo?

-Tengo que hablar contigo de un tema...algo especial.

Caminamos rumbo a su taller. Últimamente está más ocupado que de costumbre por su nueva colección. Aún falta tiempo para que llegue la primavera, ya está manos a la obra con los vestuarios.

Me encanta la temática. Vestidos de boda.

Es la primera vez que realiza un tipo de colección así, por lo que tendremos que buscar modelos femeninas. Lo que significa más trabajo.

Entramos y lo primero que veo es a un hombre de cabellos negros y amarillos, posee unos lentes circulares y un par de tatuajes en sus manos. Son kanjis y dicen...muerte y castigo.

-Lia, Hanma Shuji, tranquila, sabe hablar inglés -Mitsuya nos acercó, aquel hombre realizó una reverencia. Me sorprendió ya que normalmente se realizan frente a un superior.

-Un gusto...no hace falta que haga eso -respondí nerviosa, negando instintivamente con las manos.

-Yo lo veo bien -exclamó Mitsuya-. He notado que ciertas cosas te toman más tiempo de lo habitual o que te cuesta realizar ciertas tareas. Está muy mal de mi parte contratar a una única fotógrafa y dejarle todo el trabajo, por lo que Hanma te ayudará en todo lo que tú necesites -notó... tensión.-, serás su superior.