Mi Perfecto Caos

capitulo 6

Capítulo 6

Vigilancia

Perséfone

Mientras continuábamos con nuestras tareas en el valle aprovechamos y tomamos un pequeño baño en las aguas cristalinas. Dalia y Rosset siguen discutiendo sobre las cosas triviales

Mientras ellas discuten yo me concentro en peinar mi cabello. Esto es tan relajante hace mucho que no tenia un tiempo a solas.

"tu nunca estas sola Perséfone"

Pero me resulta agradable saber que mi madre puede darme un poco de espacio para mis cosas y es extraño ya que últimamente a estado mas rara de lo normal, siempre quiere4 saber que hago, donde estoy y que ninfas me acompañaran en mis días. Entiendo que quiera protegerme, pero en ciertos tiempos me asfixia tanta protección.

Nunca he hecho algo que ella no quiera, siempre he sido obediente a lo que me pide. Eso me convierte en una buena hija ¿no?

Me sumerjo una vez más en el agua para alejar esos pensamientos de mí, lentamente nado a donde se encuentra dalia y Rosset.

Dalia se encuentra sentada en una roca dentro del ríos trenzados su largo cabello rubio. A diferencia de Rosset, esta se encuentra flotando dentro del rio y su abundante pelo rojo rizado se encuentra esparcido por los alrededores de su rostro. Rosset en un poco más morena a diferencia de dalia y mía. Dalia tiene una tez blanca, con muchas pencas en el rostro, es delgada y alta. En cambio, Rosset es de una estatura promedio y su cuerpo es esbelto y muy llamativo. Yo por otra parte soy la más bajas entre las tres, no me quejo, sobre mi cuerpo no es muy llamativo, pero tampoco ignorado a la vista masculina. Eso lo se.

-eso seria fantástico- escucho decir a Rosset cuando llego hasta donde ellas se encuentran.

- ¿Qué cosa? - pregunto

-a Rosset le gustaría enamorarse- contesta dalia un poco burlona.

- ¿y por qué no dalia? - le pregunto directamente -debe ser muy bonito ese sentimiento

-es que doña amargada no cree en ello- dice Rosset esta vez cruzada de brazos.

-no es que no crea Rosset- le responde dalia todavía trenzado su cabello. – es que no tenemos muchas opciones-

E4stoy de acuerdo con dalia esta vez.

-¡como que no!- grita Rosset. -tenemos el olimpo a nuestra disposición.

-Rosset un dios que habite en olimpo no es mi modelo de hombre ideal-

-a mí me gustaría vivir en el olimpo-.

Las dos giran hacia mí y me miran como si estuviera loca.

-que! no está mal-.

-si tu madre te escuchara le daría un ataque ¿estas consienten? - dice Rosset

-por primeva vez estoy de acuerdo con ella, Perséfone- dice dalia mirándome lo mas seria posible.

-solo quisiera saber como es y como seria vivir en un lugar como ese-.

Termino de salir del valle y prosigo a vestirme nuevamente.

Llevo un vestido blanco de seda. Es uno sencillo, consiste en dos tiras en la parte de arriba las cuales son invertidamente cruzadas por mis senos y ajustable en mi cintura. La parte de abajo es una tela más larga que cubre toda la longitud de mis piernas y se arrastra con cada paso. llevo una sandalia ajustable en mis pantorrillas.

-eres una diosa pertenece allá ¿Por qué no estas en el olimpo si es una diosa? -. pregunta Rosset al aire.

"yo me he preguntado lo mismo"