LOVE ME HARDER

I

Jimin es un hermoso omega de veinticuatro años, es heredero de las riquezas de su familia los Park, quienes poseían muchas riquezas y empresas, jamás en su vida le hizo falta nada porque todo lo que quería siempre lo obtuvo, aunque de que le servía tenerlo todo en la vida si su madre jamás había estado para él, la mayoría de su vida fue criado por diferentes nanas casi nunca veía a su madre y cuando ella llegaba de sus negocios siempre estaba de mal humor y lo apartaba de su lado, Jimin no sabia que era sentir amor de mamá porque jamás se lo habían dado.

Era bastante callado, tímido y bastante reservado, eran pocas las veces que sonreía porque no tenía un motivo para estar feliz, tampoco salia no le gustaba viajar ni ir a lugares con mucha gente así que se la pasaba solo en la mansión, solo se divertía cuando su mejor amigo Taehyung llegaba a visitarlo, él siempre le sacaba sonrisas y lo hacía salir de su zona de confort incluso salían a algún centro comercial o a algún restaurante.

Cuando era niño se la pasaba solo en la escuela, los niños no lograban hacerlo jugar o platicar con ellos, incluso con su maestra era bastante callado hasta que los padres de Taehyung lo inscribieron en esa misma escuela para que Jimin no estuviera tan solo y si habia algo que odiara Jimin era hacer amigos nuevos o conocer gente nueva así que su única vida social era Taehyung.

Su madre alfa era una mujer bastante sería y perfeccionista le gustaba que Jimin hiciera todo al pie de la letra y si ella se enteraba que hacia algo mal lo castigaba y incluso llego a gritarle un par de veces, Jimin siempre pensó que su madre le tenía más amor al dinero que a él porque siempre estaba en sus negocios eso le importaba más.

Jimin había crecido solo con ella porque su padre omega murió en un accidente cuando él apenas tenía dos años, aveces se preguntaba que se sentía tener un papá omega o tener una familia linda y amorosa como la que tenía su mejor amigo, era algo que siempre había querido saber pero la vida es injusta aveces y solo le tocaba llorar en silencio al saber que no tenía a nadie con quien contar, pues su única familia era su mamá y ella jamás estaba.

Hoy regresaba su madre luego de estar cuatro meses en el extranjero y le había dicho que cuando llegara quería hablar con él, Jimin tenía muchos nervios porque cuando su madre le decía eso casi siempre era para regañarlo o para decirle que hizo algo mal pero en el fondo de su corazón esperaba que no fuera nada malo.

Se llego la noche y Jimin estaba sentando en el sofá esperando a su madre, dio un pequeño brinco cuando escucho que el auto de su madre se estacionó, así que se sentó recto a esperar que ella llegara a la sala, ella le dio sus cosas a su sirviente y luego se dirigió a la sala camino hasta el sofá, se sentó y se le quedó viendo seriamente a Jimin.

— Que bueno que estés aquí esperándome para hablar, quiero que me pongas mucha atención a lo que te voy a decir y no quiero quejas de nada, ¿entiendes?

— Si madre — Jimin estaba muy nervioso — ¿que es lo que quieres hablar conmigo?

— Vas a casarte — soltó la noticia sin nada de tacto por lo que fuera a sentir su hijo

— ¿Que dices madre? — Jimin estaba esperando que fuera una broma, pero sabía que su madre no era una persona que hacía bromas

— En un mes será tu boda con el hijo de la familia Min, ese matrimonio nos conviene Jimin así que no lo arruines — cada palabra que ella decía le caían como balas en el corazón a Jimin

— Madre nisiquiera me preguntaste si quería casarme o no — el corazón de Jimin dolía y en ese momento tenía unas enormes ganas de llorar

— ¿Para que lo iba a hacer?, te vas a casar y punto, eres mi hijo y como tal vas a hacer lo que yo te diga — lo vio directo a los ojos — mañana vendrán los modistas por ti para hacerte la medidas de tu traje de bodas, almenos podrás escoger el que te guste

— Nisiquiera te importa cómo me siento o si quiero casarme o no — empezó a alterarse, mientras lágrimas caían por sus ojos — soy tu único hijo y me tratas como si fuera un objeto del cual quieres deshacerte, ¿porque me odias tanto? — le pregunto con dolor en su corazón

— Solo estoy viendo lo que es mejor para ambos, deberías ser un poco más agradecido y dejar de hablarme de esa manera porque soy tu madre y me tienes que respetar

— Mi papá jamás me hubiera echo lo que tu me haces, él jamas me hubiera ofrecido como un objeto para hacer más dinero

— ¡Cállate Jimin no hables de él! — la señora Park grito

— No tienes idea de cuanto te odio — se levantó del sofá y se fue corriendo a su habitación, mientras seguía llorando

Mientras la señora Park, se sentía mal por las palabras que Jimin le acababa de decir, pero esa boda era lo mejor para él, bueno para ambos y el compromiso ya estaba echo, no había nada que se pudiera hacer para cancelar la boda

Jimin se encerró en su habitación y se acostó en su cama mientras lloraba amargamente, él siempre soñó en casarse por amor y formar una linda familia, pero la vida era tan injusta que tendría que casarse con alguien a quien no conocía y no amaba, en ese momento quería huir y irse lejos pero sabía que estuviera en donde fuera su madre siempre lo iba a encontrar así que no era opción, solo le tocaba aceptar su destino.