LOVE ME HARDER

XXIII

Jimin estaba pasado por un momento muy difícil en su matrimonio, el omega ya no podía soportar más todo lo que escuchaba cuando iba a la empresa de su esposo. Al principio solo eran los empleados los que hablaban de eso a escondidas y cuando lo veían lo hacían con caras de lastima, odiaba eso, odiaba que lo vieran como el esposo engañado.

Además el secretario ya no tenía vergüenza, incluso le había dicho a él personalmente que Yoongi y él tenían algo que ver.

Trataba de ser fuerte y pensar positivo, porque las cosas en su matrimonio no habían cambiado, su esposo siempre era atento y amoroso, pero aún así escuchar todo eso lo hacía sentirse mal todos los días. Incluso llegó al punto de que solo llegaba a su casa y lloraba por horas hasta quedarse dormido.

Yoongi estaba muy preocupado por su esposo, a través de la marca podía sentir el dolor de su omega, las primeras veces cuando le preguntaba a Jimin no le decía casi nada solo que había visto una serie que lo hacía llorar. Pero eso no lo convenció para nada, no iba a dejar pasar más tiempo y hoy cuando saliera de trabajar iba a llegar a su casa y se iba a sentar a hablar con su esposo hasta que él le dijera que estaba pasando.

Las horas se pasaron rápidamente, Yoongi salió de trabajar y cuando llego a su casa, no vio a su esposo por ningún lado, era extraño antes su esposo lo recibía con besos y abrazos cada vez que llegaba, ahora nisiquiera lo recibía.

Subió a su habitación y sonrió al verlo dormido, se acercó despacio a él y le dio un beso en la frente, Jimin empezó a abrir sus ojos y se estiro un poco.

— Yoonie — tallo sus ojos y sonrió

— Buenas tardes dormilón, perdóname por despertarte — le acaricio el cabello

— No te preocupes, esta bien, además ya casi iba a levantarme

— Jimin — suspiro — quiero hablar contigo

— ¿Hablar de que? — el corazón de Jimin empezó a doler, creía que en ese momento Yoongi lo iba a dejar por su secretario

— No soy tonto, se que todos los días estas mal y necesito que me digas por que te la pasas triste — le agarro las manos y las acaricio un poco —¿acaso ya no te hago feliz?

— No es eso, Yoongi tu me haces muy feliz

— ¿Entonces?, ¿que pasa?, dímelo por favor necesito saberlo

— Solo quiero preguntarte algo

— Si, dime

— ¿Me amas?

— Por supuesto que te amo, eres mi esposo y el amor de mi vida, eres mi omega y no quiero volver a sentirte triste, crees que no me he dado cuenta las lagrimas secas que tienes en tus lindas mejillas — le dio un beso en ambas mejillas — tienes tus hermosos ojos inchados por llorar y no me gusta verte así

— Hazme el amor — pidió con una voz llena de dolor

— Amor, hablemos primero y luego lo haremos

— ¿Por que?, ¿no quieres?, ¿es por que ya no soy lindo para ti?

— Solo escucha lo que estas diciendo amor mio — lo abrazó fuertemente — eres el omega más hermoso que mis ojos han visto, claro que quiero hacerlo pero quiero hablar contigo primero

Jimin empezó a llorar en los brazos de su amado, se sentía muy inseguro, pensaba que su alfa ya no veía lindo, que ya no lo deseaba. Yoongi también empezó a llorar, se sentía como un mal alfa y esposo por no poder hacer feliz a su omega, además que su lazo dolía.

— Por favor, te lo pido, dime que pasa. Odio que estemos así los dos, nuestro lazo duele

— Todos en la empresa dicen que tu secretario es tu amante — empezó a contarle mientras lágrimas salían de sus ojos y resbalaban por sus mejillas — al principio trate de no hacer caso, porque se que me amas, pero conforme pasaban los días, lo escuchaba cada vez más incluso tu secretario me lo decía a la cara. Una vez cuando llegue a visitarte a tu oficina, él iba saliendo y me dijo que no entrara porque te había dejado agotado

Yoongi no podía creer lo que estaba escuchando, no podía creer que ese tipo haya llegado a tanto, mañana mismo lo iba a despedir sin ningún tipo de consideración y lo iba a demandar por difamación.

Nadie hacía llorar a su omega sin pagar las consecuencias y sobretodo porque le había causado dolor a su lindo esposo. De haber sabido que esto estaba pasando, lo hubiera despedido desde hace días, pero mañana mismo lo haría.

— Amor, escúchame, nada de eso es verdad. Yo jamás he tenido nada que ver con él ni con nadie más — lo agarro suavemente de la barbilla para que ambos se vieran a los ojos — solo te amo a ti, solo te deseo a ti, eres el esposo perfecto y quiero que te quede claro que no te cambiaré por nadie, mucho menos estaría con alguien que no seas tu. Solo tu sabes como satisfacerme, solo tu me has hecho sentir lo que es el amor. Todos los días los quiero pasar a tu lado desde que el sol sale hasta que se oculta, no tienes idea de lo triste que me voy a trabajar porque lo único que deseo es quedarme aquí contigo, te amo Jiminie jamas dudes de mi amor por ti. Mañana voy a solucionar todo esto y si alguna vez vuelve a pasar dímelo de inmediato

— Perdón por dudar de ti, lo siento, debí decírtelo antes — abrazo a su alfa y olfateo un poco de su aroma natural — se que amas como yo te amo a ti — le dio un beso en los labios

— Perdóname tu a mi por no darme cuenta de lo que estaba pasando — puso sus manos en la cintura de su omega y lo acercó más a él, volvió a besarlo y luego se acomodaron en la cama

Se dieron caricias el resto de la tarde y se quedaron dormidos, inconscientemente Yoongi puso una de sus manos en el vientre de su esposo y Jimin sonrío, mañana iba a confirmar lo que tanto ha sospechado.